Alergias

«Las próximas semanas van a ser un poco duras para los alérgicos»

Entrevista Teresa Dordal, doctora y alergóloga

La alergóloga Teresa Dordal
La alergóloga Teresa Dordallarazon

Entrevista Teresa Dordal, doctora y alergóloga.

Con la llegada de la primavera, la situación de aquellas personas que sufren algún tipo de alergia respiratoria habitualmente se complica a consecuencia de la polinización, sin embargo ello depende también de otros factores. Cada vez son más las personas afectadas por algún tipo de alergia, sin embargo a día de hoy existen varios métodos de prevención.

–¿Qué es una alergia respiratoria? ¿A qué se debe?

–Es una respuesta exagerada del cuerpo ante una sustancia exterior como puede ser un polen o un ácaro, que provoca una serie de síntomas molestos para el paciente. Los síntomas habituales son rinitis, conjuntivitis, tos o incluso asma. Una alergia es potencialmente grave. Hay formas de alergia, como a los medicamentos o a los alimentos, que si no se tratan rápido podrían llegar a comprometer la vida del paciente; la alergia respiratoria puede llegar a ser grave, sobre todo a nivel de asma, por ejemplo

–¿A qué se deben las alergias, a factores genéticos o externos?

-Es una mezcla de factores. Sí que parece que hay un componente genético, pero por otro lado, los factores ambientales son también muy importantes. No sabemos exactamente por qué hay tantas alergias, pero sí que parece que el estilo de vida que llevamos en los países occidentales puede favorecer que se desarrollen. Probablemente, el sistema inmunológico se equivoca y considera como peligrosas cosas de nuestro entorno que no lo son y eso es lo que acaba provocando la respuesta alérgica.

-Entonces, ¿se ha incrementado el número de personas que sufren alergia?

- La Sociedad Española de Alergia hace cada diez años un trabajo epidemiológico para ver qué cambios hay y lo que se ha observado es que ha aumentado mucho el porcentaje de alergias a alimentos y de 2005 a 2015 ha habido un incremento de la alergia alimentaria de casi más de un 50% . En las alergias respiratorias vamos viendo una tendencia progresivamente creciente y ahora nos situamos en un 21-25% de la población con alguna alergia respiratoria. Los expertos prevén que hacia el 2050 el 50% de la población tendrá algún tipo de alergia.

- ¿Cuáles son los factores externos que pueden estar involucrados en el desarrollo de una alergia respiratoria?

-Hay muchos factores. La contaminación influye porque, por un lado, irrita la vía respiratoria y eso la hace más sensible a otras cosas que respiramos; por otro lado, los pólenes de las zonas urbanas que están expuestos a contaminantes generan proteínas para defenderse de estos contaminantes que los están agrediendo y estas proteínas son más potentes desde el punto de vista alérgico y generan respuestas alérgicas más potentes. Además, la contaminación, el cambio climático y el efecto invernadero hacen que los pólenes se queden más tiempo en las zonas bajas, con lo cual los respiramos más rato, no se limpia tanto la atmósfera. Luego hay otros factores que probablemente están relacionados con el estilo de vida. Hay muchas teorías pero la que últimamente se impone es que, como no estamos expuestos a tantos microbios desde que nacemos, el sistema inmunológico pierde la capacidad de tolerar y eso es lo que acaba provocando alergias

–Estamos ya en la primavera. ¿Qué previsiones hay en cuanto a las alergias respiratorias?

-Este año, como ha llovido mucho en febrero e incluso ha nevado, se ha retrasado la polinización de los árboles que suelen ser los primeros, básicamente el ciprés y el platanero, pero como ha llovido mucho y, por lo tanto, el suelo está húmedo, a la que suban un poco las temperaturas y el clima sea un poco más favorable, empezarán a polinizar con fuerza, con lo que es posible que en las próximas semanas tengamos cifras importantes de polen de ciprés y de platanero, que son los primeros. Luego habrá que ver un poco cómo va evolucionando la primavera: si sigue lloviendo pero las temperaturas se mantienen cálidas y templadas, probablemente las plantas, las hierbas, arrancarán con fuerza y también habrá cifras de polen altas; si hace mucho calor, las plantas se mustian y el polen puede bajar. Pero de entrada, las próximas semanas van a ser un poco duras para los pacientes alérgicos

-Y sabiendo esto, ¿qué puede hacer el paciente? ¿Qué recomendaciones le da?

- Lo primero que tiene que hacer una persona que tiene síntomas alérgicos es consultar a un alergólogo para hacerse un estudio y así le podrán indicar cuál es su temporada de riesgo. Una vez sabes esto, lo ideal es intentar prevenir la exposición, lo cual es muy difícil, por lo que lo importante es hacer un tratamiento preventivo, que hay que empezarlo antes. Normalmente, lo que hacemos es dar algo dos o tres semanas antes de la época de polinización y , a medida que avanza la temporada, vamos dando tratamiento para compensar los síntomas según aparecen. Otra posibilidad en función de la alergia que se padece sería plantear un tratamiento con una vacuna específica, que es un tratamiento que va más dirigido a la causa pero es lento y hay que hacerlo durante cuatro o cinco años

-Sobre la vacuna, ¿cómo funciona?

- Las vacunas están hechas con la sustancia a la cual el paciente es alérgico. Se administran dosis de manera regular, normalmente una vez al mes, y esto hay que hacerlo durante varios años para conseguir que el sistema inmunológico cambie y considere que esa sustancia no es perjudicial, sino que el cuerpo aprenda a tolerarla. Es un tratamiento que va haciendo efecto progresivamente, de manera que hay que tener paciencia porque es posible que al principio no se note demasiado la mejoría. Y no hay ninguna incompatibilidad con el tratamiento que habitualmente damos, como el spray o los antiestamínicos. Así tenemos que verlo como un tratamiento complementario, pero si funciona el paciente no necesitará tanta medicación. La vacuna no erradica la alergia, sino que solo la controla, de manera que el cuerpo, como adquiere tolerancia, puede llegar a no tener ningún síntoma, aunque la alergia sigue ahí.