Barcelona

Los manteros se hacen fuertes en Colón gracias a un vacío legal

El Ayuntamiento negocia con el Puerto la jurisprudencia de la Guardia Urbana

Los alrededores de Colón convertidos en un zoco improvisado
Los alrededores de Colón convertidos en un zoco improvisadolarazon

El top manta va camino de convertirse en una piedra seria en el camino de la alcaldesa de Barcelona Ada Colau. El buenismo exhibido hasta ahora sirve, sin duda, como guiño a su electorado y como muestra de buena voluntad hacia los manteros. Pero dista mucho de resolver la problemática. Ni siquiera con la reciente conversión de los vendedores en sindicato. El Ayuntamiento ha ganado un interlocutor, cierto, pero con un 20 por ciento de paro en Barcelona, un sindicato per se no genera empleo regulado que es, a fin de cuentas, de lo que se trata. Por si esto fuera poco, la nueva ubicación de los manteros supone un nuevo reto para el Ayuntamiento.

Desde el pasado verano, los manteros empezaron a colocarse en las inmediaciones de la estatua de Colón. Con el aumento de la presión policial hace un mes, más y más manteros comenzaron a desplazarse hasta la parte baja de la ciudad hasta convertir el Moll de la Fusta en una suerte de zoco improvisado. A sabiendas o no, lo cierto es que el espacio escogido conforma una de esas fronteras burocráticas en las que se diluyen las competencias. Para la Guardia Urbana es territorio de la policia portuaria y viceversa. Por ello, la alcaldesa explicó ayer que están negociando con el Puerto de Barcelona una solución a esta situación.

La sección sindical de CCOO en la Autoridad Portuaria de Barcelona explica que los vendedores ambulantes utilizan esta zona «como refugio de la Guardia Urbana de Barcelona, dado que el Puerto opera el Cuerpo de Guardamuelles de la Autoridad Portuaria de Barcelona, con muchos menos efectivos disponibles». El presidente de la Autoridad Portuaria ya pidió el pasado mes de septiembre ayuda a los Mossos porque la gran presencia de manteros en la zona ha desbordado los agentes que controlan la seguridad del Puerto y sus inmediaciones.

El presidente del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, reclamó a Colau que «no convierta Barcelona en un zoco del top manta, ya que la imagen de plaza Colón desbordada por manteros que campan a sus anchas o la situación de otras zonas como Port Vell o Paseo de Gràcia son inaceptables». El presidente popular pidió «un plan de choque contundente contra el arraigo del top manta en la ciudad, ya que el problema de los manteros y la venta ambulante se esta incrementando de una forma incontrolable en toda la ciudad, especialmente desde el pasado verano, tras la llegada de Colau como alcaldesa de Barcelona». A su juicio, «el gobierno de Colau ha generado un efecto llamada».