Sarrià se llena de basura ante la pasividad del Ayuntamiento

La madrugada del martes Sarrià se levantó con las calles llenas de basura. Bolsas en los portales, bolsas en las esquinas, bolsas delante de los contenedores. Una imagen que se ha repetido día tras día desde que el pasado lunes se iniciara el plan de recogida selectiva que el Ayuntamiento de Barcelona ha implantado en este barrio a modo de banco de pruebas.

La madrugada del martes Sarrià se levantó con las calles llenas de basura. Bolsas en los portales, bolsas en las esquinas, bolsas delante de los contenedores. Una imagen que se ha repetido día tras día desde que el pasado lunes se iniciara el plan de recogida selectiva que el Ayuntamiento de Barcelona ha implantado en este barrio a modo de banco de pruebas. «El Consistorio juega a hacerse el “progre” y nos está utilizando como conejillos de indias», aseguró Assumpta, una vecina sin tener claro qué debe residuos debía sacar a la calle.

De momento, al Ayuntamiento no le quedó más remedio que alargar la campaña informativa ante el desconcierto vecinal. Desde el lunes por la noche los habitantes de la parte antigua de Sarrià deben sacar sus residuos a la puerta de sus casas entre las 20 y 22.00. Ese mismo día las calles estaban medio vacías, casi nadie conocía la nueva medida municipal. En cambio, las bolsas se amontonaban delante de los contenedores, que quedaron sellados por orden municipal. Pequeños camiones recogían las pocas bolsas que se encontraban frente los domicilios y enganchaban pegatinas a los deshechos mal clasificados, que se quedaron el calle durante todo el día siguiente.

«No hay quien entienda nada», aseguró Carme a este diario, una señora de edad avanzada sorprendida al encontrarse sus bolsas de basura intactas frente a su puerta al día siguiente. «Pensaba que lo había hecho bien», se lamentó convencida de que le tocaba sacar el cartón y los residuos orgánicos. A partir del pasado lunes, el Ayuntamiento solo hace la recogida de residuos en Sarrià los lunes, miércoles, viernes y domingos. Todos esos días se pueden sacar los residuos orgánicos y el rechazo. Además, los lunes también se pueden sacar los residuos sanitarios; los miércoles y domingos, los envases y plásticos; y los viernes, el papel y el cartón. «Yo ya estoy mayor ara hacer gincanas» o «el Ayuntamiento ha perdido la cabeza» son algunos de los comentarios más suvaes que los vecinos dedican al Consistorio ante esta nueva iniciativa.

Otra vecina denunció que «no se ha consultado previamente a los vecinos sin tener en cuenta la complexidad de este sistema y lo anihigienico que es», en referencia a la presencia de bolsas de basura en plena acera, algo visible a la luz del día. Añadió que «hay gente con bebes y gente mayor a las que se les complica muchísimo este sistema de recogida de residuos ya que los pañales, compresas o productos sanitarios sólo pasan a recogerlos dos veces a la semana». Los residentes en Sarrià vieron como ayer no podían tirar ninguna bolsa, y nada se recogerá hasta mañana.

«Está todo Sarrià lleno de bolsas de basura, encima el viernes tenían que pasar a buscar los residuos orgánicos, los sanitarios y el papel y ¡no se han llevado nada! Y hasta mañana lunes no pasan. ¿Tenemos que estar así tres días? El cubo que nos dieron para los restos de residuos orgánicos está en la calle desde viernes por la noche, y no lo han recogido, por lo que ¿dónde tiro ahora la basura? ¡Los perros urgan en ellos y es un foco de infeccion! ¡Estamos volviendo hacia atrás!» lamentó.

Otro residente, Manuel, señaló que «estoy indignado con la nueva iniciativa de Colau. En primer lugar es totalmente antihigiénico tener dejar el cubo de la basura en la calle y tener que recogerlo al día siguiente lleno de suciedad y de orines de perros. No entiendo que ocurra en un barrio que siempre ha sido una zona ejemplar por la limpieza y civismo».