Acuden a clase con bañador y toalla en protesta por el alto calor en las aulas

Alumnos del colegio Santa Teresa de Valencia han acudido este lunes al centro ataviados como si fueran a la playa --con bañador, chanclas, toalla y juguetes-- en protesta por las altas temperaturas, de alrededor de 30 grados, que se alcanzan en las aulas estos días.

La protesta --que se ha desarrollado esta mañana entre las nueve y las nueve y diez aproximadamente a las puertas del centro-- pretende poner de manifiesto un problema de temperaturas que el colegio "viene arrastrando desde hace años, que se ha comunicado a la Dirección Territorial de Educación y que este año se ha visto agravado por adelanto del curso al 3 de septiembre", han explicado a Europa Press fuentes de la Asociación de madres y padres de alumnos (AMPA).

El presidente de este colectivo, Jordi Boluda, ha señalado que, en el caso de este centro, se trata sobre todo de un problema de infraestructuras, ya que las instalaciones cuentan "con cristaleras, no hay sombra ni se ha puesto aire acondicionado, lo que provoca que el calor sea un problema, no solo esta semana, sino hasta octubre, pero no se pone solución".

La acción del CEIP Santa Teresa se une a otras que desde la pasada semana se están llevando a cabo en diversos centros de la Comunitat Valenciana para denunciar que las temperaturas que se están registrando en las aulas superan los 27 grados que marca la legislación laboral para el tipo de trabajo docente.

El viernes, alumnado de colegios de las localidades de Almoines y Carcaixent fueron al centro escolar también en bañador y toallas con el fin de escenificar "el calor que están sufriendo".