El paro registra un descenso de 7.743 desempleados en julio

El número de parados en la Comunitat Valenciana descendió en 7.743 personas durante el pasado mes de julio, lo que supone una bajada del 1,61 por ciento respecto al mes anterior y del 9,58 por ciento en términos anuales.

De esta forma, según los datos publicados ayer por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, la Comunitat se ha convertido en la cuarta región donde más descendió el paro en julio con una cifra de 473.880 desempleados.

Por provincias, Valencia contaba con 240.491 personas sin empleo en el mes de julio frente a los 243.074 del sexto mes del año, en Alicante los parados fueron 181.392 con una reducción de 3.610 individuos respecto a junio y finalmente Castellón contabilizó 51.997, es decir, hasta 6.208 parados menos que el mes anterior.

Desde el ámbito político, el delegado del Gobierno de la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues destacó que este descenso supone «el mejor dato histórico de los últimos 17 años en julio en España». Asimismo, la actual coordinadora general del Partido Popular de la Comunitat, Eva Ortiz, afirmó que estos números reflejan la consolidación de la tendencia de creación de empleo que han propiciado las reformas emprendidas por los gobiernos del PP tanto en el ámbito nacional como en el autonómico.

Además, Ortiz recordó que «las recetas» que aplica la izquierda «destruyen» puestos de trabajo y exigió al actual presidente de la Generalitat, Ximo Puig que «no ponga en peligro» esta dinámica «cediendo al sectarismo ideológico» de sus socios de gobierno.

Mientras tanto, la secretaria autonómica de Economía Sostenible, María José Mira, aseguró que a pesar de que el desempleo había bajado, se trata de trabajo «precario y de escasa calidad» por lo que la aplicación de políticas «resolutivas y acordes» con las necesidades de los sectores productivos y de la sociedad valenciana, pasan por una mayor financiación por parte del Estado. El Consell, a través de Mira, también reiteró que los que auguraban «una pérdida de confianza y por tanto una disminución de puestos de trabajo» con la llegaba del nuevo gobierno al poder, se equivocaban.

Por su parte, tanto CCOO-PV como UGT-PV, afirmaron que el empleo creado en julio era «estacional y de mala calidad» por lo que abogaban en la necesidad de crear un modelo que permita «no solo generar empleo, sino que sea de calidad y estable».