Fabra afirma que gobierna para los que sufren, «no para los que gritan»

valenciA- La tensión se va relajando o al menos, el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ya se ha acostumbrado a las protestas que le acompañan allá donde va. Ayer plantó cara a los manifestantes diciendo que «no le preocupan quienes gritan, sino los que sufren y quieren hacer una Comunitat mejor». Medio centenar de trabajadores de Radiotelevisió Valenciana (RTVV) le esperó a la entrada del Ayuntamiento de Nules, pero también hubo quien le aplaudió.

Fabra incidió en que su Gobierno entiende que lo que hay que apoyar es aquello que genera actividad económica y bienestar. En este sentido, afirmó que la Comunitat Valenciana va a diferenciarse de otras Autonomías en la lista de prioridades, en clara alusión a Cataluña y Andalucía que mantienen medios de comunicación públicos, a pesar de su altísimo coste y su elevada deuda. «Para nosotros, lo fundamental son las personas y he tenido que eliminar aquello que no era tan fundamental» porque podía poner en riesgo cuestiones irrenunciables.

Era la enésima justificación al cierre de RTVV, que en su visita a Nules fue acompañada de anuncios muy esperados para esta localidad.

Apoyo a la agricultura

Fabra quiso ayer dar muestras del esfuerzo de la Generalitat por apoyar aquellas cuestiones que sí están en el apartado de prioridades del Consell. Anunció el apoyo técnico y comercial a la nueva marca colectiva «Auténtica de Nules», puesta en marcha por la Asociación de Comercializadores de Cítricos de esta localidad.

En la Comunitat hay 3.000 cooperativas, 370 vinculadas al sector agroalimentario que genera el 75 por ciento de las exportaciones citrícolas de toda España. De estas, el 80 por ciento de las naranjas que se producen son de la variedad «clemenules».

Completó los anuncios con el compromiso de que el próximo año comiencen las obras del colegio Pedro Alcázar. 300 alumnos podrán dejar de asistir a clase en aulas prefabricadas.

El alcalde de Nules, el popular Mario García, hizo público su apoyo a Fabra. Al contrario de otros ediles del PP, que han preferido mantenerse al margen del cierre de RTVV, aseguró que el presidente ha tomado una «decisión complicada, pero responsable y comprometida».

Sin embargo, no perdió la oportunidad para reclamar mayor apoyo a los agricultores. Aseguró que las cinco cooperativas locales pueden generar un volumen de negocio anual que ronda los 56 millones de euros, por lo que pidió más ayudas para los productores, que son «el eslabón más débil de la cadena».

Más críticos fueron los representantes de las cooperativas, quienes pidieron recuperar las subvenciones para la retirada de calibres no comerciales e incrementarlas exigencias fitosanitarias a los cítricos importados. Recordaron que el sector se ha mantenido estos años, «que no se olvide cuando pase la crisis».