La construcción y las exportaciones, motores de la economía valenciana en 2018

Se seguirá creando empleo a lo largo del ejercicio hasta dejar la tasa de paro en el 14,3 por ciento

El sector de la construcción empezó a dar signos de revitalización a lo largo del año pasado, y durante este ejercicio seguirá creciendo hasta convertirse en uno de los motores de la economía valenciana, tanto en rehabilitación como en obra nueva. Así se desprende del informe elaborado por la Cámara Valencia sobre las perspectivas económicas para este año.

Según el documento, la economía valenciana, al igual que la española, experimentará durante 2018 una ligera desaceleración, al pasar del 3,1 por ciento el año pasado al 3 o 2,4 por ciento (dependiendo de la institución que lo analice) para este año. Aún así, el desarrollo de la economía valenciana se volverá a situar, como en 2017, por encima de la española.

El mercado del alquiler inmobiliario será, según el documento de la Cámara, uno de los de mayor crecimiento, así como el de las ventas al exterior. Frente al moderado comportamiento de las exportaciones valencianas en 2017, el crecimiento económico esperado a nivel mundial en 2018 supondrá un motor para las exportaciones de la Comunitat Valenciana, condicionado parcialmente por algunos factores de incertidumbre como son el Brexit, el tipo de cambio o conflictos políticos en determinados mercados.

Uno de los factores que estimulará la economía valenciana durante este año serán el notable crecimiento de la economía mundial, que implicará un impulso del turismo extranjero, una mayor demanda de las exportaciones valencianas y un mayor dinamismo de las inversiones extranjeras de capital.

Además, la aprobación y entrada en vigor de nuevos tratados de libre comercio de la Unión Europea con Canadá y Japón, favorecerá a medio y largo plazo las exportaciones valencianas.

Además, las positivas expectativas de creación de empleo favorecerán el aumento de la masa salarial, la confianza del consumidor y, en definitiva, el consumo. Pero existen también factores de riesgo internos, que en el caso de la Comunitat serían según el documento de la Cámara, la inestabilidad política de Cataluña, que genera incertidumbres a nivel empresarial; la deuda de la administración autonómica valenciana, que sigue siendo elevada; y el progresivo aumento de algunos de los gastos fundamentales para el consumidor, como alquileres, suministro energético, ocio, que pueden incidir negativamente en su poder adquisitivo.

El paro sigue bajando

El paro registrado en la Comunitat Valenciana durante el pasado mes de febrero disminuyó en 2.045 personas hasta quedar situado en 392.794 demandantes de empleo, lo que representa un descenso del 0,52 por ciento, 34 décimas más que la media española, situada en menos 0,18 por ciento.