Sociedad
Los microcréditos del Monte de Piedad ayudan al veraneo de muchos valencianos
Bancaja también asegura la custodia de la joyas en los meses de ausencia del domicilio familiar
Con el mes de agosto a la vuelta de la esquina, son muchos los españoles que todavía están intentando cuadrar números para financiar sus vacaciones. Playa, montaña, aventura o relax, da igual. Lo importante es aprovechar la pausa estival para desconectar y retomar el ritmo con las pilas cargadas. Eso sí, cualquier plan requiere un gasto extra en la economía familiar y el acceso a los préstamos al consumo no siempre es fácil, pero hay alternativas.
Frente a la tramitación compleja y no inmediata para solicitar un crédito tradicional al consumo, existe una vía mucho más sencilla: el empeño de joyas. Si se dispone de una joya, se dispone de lo único necesario para acceder a un microcrédito inmediato y, además, la joya queda custodiada hasta que se recupere, de modo que el valor siempre es del cliente. Además, resuelve el problema de dónde guardar las joyas durante las vacaciones para no dejar estos objetos de valor en el domicilio. Esta vía de financiación ágil y accesible es la que ofrece el Monte de Piedad de Fundación Bancaja, que lleva 140 años desarrollando esta actividad.
entre el 11 y el 13 por ciento
Desde su nacimiento ha cubierto la necesidad de financiación a las personas con dificultades de acceso al crédito tradicional, pero en los últimos años se ha consolidado como una vía más de financiación al consumo por sus ventajas competitivas. Un imprevisto, un viaje, una celebración familiar o cualquier otro gasto a la vista encaja en este tipo de microcréditos que cuentan con una TAE de entre el 11 por ciento y el 13 por ciento anual, frente a importes superiores al 100 por ciento en otro tipo de establecimientos que trabajan con joyas y lejos también de porcentajes superiores al 20 por ciento en el caso de aplazamientos de compras pagadas con tarjetas de crédito u otro tipo de créditos rápidos al consumo.
Desde el Monte de Piedad de Fundación Bancaja estiman que durante 2017 la actividad crezca en torno a un 5 por ciento. De hecho, en los últimos años, además de su tradicional oficina de Valencia, la entidad ha abierto sucursales en Castellón, Alicante y Murcia.
El funcionamiento de este tipo de microcréditos es sencillo. Cualquier ciudadano acude a una oficina del Monte de Piedad con su joya, recibe una valoración de la pieza con el máximo valor de mercado en función del precio del oro, brillantes u otro material que incorpore y se entrega al cliente el importe de la valoración en efectivo, de forma inmediata.
Operativa ágil e inmediata
La joya la única garantía requerida. La tasación se realiza por parte de un equipo de profesionales gemólogos y con la utilización de balanzas certificadas por la Unión Europea y homologadas por organismos reconocidos. Son créditos a un año, que se pueden renovar cuantas veces se necesite y las joyas pueden recuperarse en cualquier momento de la vida del préstamo. En caso de no poder devolver el crédito, se buscan soluciones adaptadas a cada cliente, además de la salida a subasta en la que el remanente sobrante que pueda generarse queda a disposición del cliente. En cualquier caso, la tasa de recuperación de las joyas es muy alta, pues el 97 por ciento de los clientes la recupera sin llegar a subastarse, manteniendo ese patrimonio de valor económico y sentimental.
El Monte de Piedad de Fundación Bancaja cuenta actualmente con más de 12.200 clientes y una cartera de préstamos de 19 millones de euros.
Los beneficios que se obtienen del Monte de Piedad revierten, además, en la financiación de la intensa actividad cultural y también social que desarrolla la Fundación Bancaja.