Valencia

«Somos Esenciales» visibiliza historias que despierten la emoción en las personas

Un grupo de jóvenes valencianos lanza una plataforma digital que invita a conectar con historias que puedan dar ejemplo, inspirar y transmitir valores

«Somos Esenciales» visibiliza historias que despierten la emoción en las personas
«Somos Esenciales» visibiliza historias que despierten la emoción en las personaslarazon

Un grupo de jóvenes valencianos lanza una plataforma digital que invita a conectar con historias que puedan dar ejemplo, inspirar y transmitir valores

Un grupo de jóvenes valencianos ha puesto en marcha el proyecto «Somos Esenciales», una iniciativa periodística de carácter social que cuenta historias reales, de superación. Historias ignoradas y que, sin embargo, merecieron ser contadas. Aquellas que puedan otorgar ejemplo, una enseñanza, inspirar al público al que se dirige.

La idea surgió de la voluntad de recuperar la ‘esencia’ del periodismo, volver a sus cimientos. Retomar aquel periodismo humano, basado en el contacto con la calle. Aquel que entabla diálogo con la gente de a pie.

«No podemos aventurarnos a adivinar a dónde nos llevará este proyecto, pero lo que sí podemos y queremos prometer es que todas las personas e historias que pondremos voz cada semana son excepcionales. Esa palabra que solo puede emplearse en ocasiones especiales», relata Marta Bonilla, CEO de Somos Esenciales.

Un proyecto donde cada una de las personas que lo integran comparten algo en común: ilusión.

«Somos un grupo eminentemente valenciano cuya edad media oscila en torno a los 24 años. De alguna manera queremos incentivar a otros jóvenes a que se lancen a hacer cosas, que demuestren su valía porque hay mucho talento en Valencia y en España en general por ser descubierto. Si tienen un sueño, como tuvimos nosotros, que trabajen cada día por él. Pero no vale con quererlo hay que visualizarlo, darle forma, materializarlo y al final con mucho esfuerzo y horas de trabajo se acaba consiguiendo», insiste Pau March, co-fundador del proyecto.

Somos Esenciales (somosesenciales.es) nació hace unas semanas, y una de sus primeras publicaciones ya ha alcanzado las 7.000 visualizaciones en diferentes plataformas digitales. Semanalmente comparten de manera visual como escrita una nueva historia siguiendo cuatro líneas temáticas:

Historias de cuenten el desafío al que debió hacer frente una persona y que, a pesar de la crudeza, supo extraer y trasladar el lado positivo. Son la clase de historias que trasladan una lección de vida.

Historias de carácter social. Aquellas que puedan incentivar a la gente a velar por los demás: desde ayudar a un amigo, colaborar en un comedor social, o con una ONG. En definitiva, motivar a realizar acciones en pro de los demás, o cuanto menos hacer valorar a nivel personal sobre las pequeñas cosas que nos regala la vida.

Historias de crecimiento personal y/o laboral. Con esta clase de historias se pretende trasladar el mensaje de que se pueden alcanzar grandes metas si se trabaja cada día para la consecución de dicho fin.

Historias que otorgan visibilidad a colectivos vulnerables: migrantes, refugiados, personas con alguna discapacidad, en riesgo de exclusión social. El objetivo es otorgar visibilidad exclusiva, y sobre todo, tratarles como lo que son: personas, de principio a fin.

«Se trata de un proyecto ante todo de personas. A través de la historia que comparten son capaces de hacernos valorar con respecto a todo cuanto tenemos; replantearnos cómo nos tomamos las cosas que nos ocurren en el día a día, o simplemente darnos motivos por los que deberíamos dar un poco más las ‘gracias’ a la vida», describe Quique Tarazona, responsable de la producción audiovisual.

«Cuando nos decantamos por apostar por este proyecto nos enfrentamos al miedo. El miedo a fracasar para ser exactos, aunque bajo nuestro punto de vista, consideramos que es un concepto erróneo que nos vende la sociedad. Medimos el éxito en números, cuando debería ser en grado de satisfacción. Y utilizando este indicador podemos garantizar que este proyecto es todo un logro», explica Melissa Olmedo, guionista y productora.

Somos Esenciales emplea la primera persona del plural porque este proyecto persigue ser inclusivo. Esenciales -nombre inicial- a medida que fue creciendo decidió que pasaría a llamarse ‘Somos Esenciales’ con el objetivo de tender la mano al público a formar parte de él. De hecho, Somos Esenciales pone el foco en convertirse en algo más que un diario digital. Por ello, trabajan desde el día uno de lanzamiento en dar la oportunidad al público a experimentar e interactuar dentro y fuera de la red.

«Se trata del mayor reto al que nos enfrentamos, pero al mismo tiempo será lo que más valor y diferenciación nos otorgue a medio-largo plazo. Por regla general, las historias se quedan en el recuerdo durante un margen de tiempo, pero finalmente tienden a olvidarse. Pero, ¿qué ocurre cuando las experimentas? Según una frase que reiteramos mucho ‘la gente olvidará lo que dijiste, olvidará lo que hiciste, pero nunca olvidará cómo les hiciste sentir’. Este es nuestro fin con Somos Esenciales hacer que el público no solo lea una historia, sino que la experimente, que la recuerde», cuenta Paula Monteiro, Community Manager.

Sus creadores tienen prevista la organización de sus propias ponencias ‘esenciales’ de cara a finales de año. Convocar al público a escuchar historias inspiradoras. Una iniciativa que rescatan de proyectos similares, y que son bien acogidos, como las charlas TEDex.

«Otro de los proyectos en los que estamos trabajando es pequeños ESENCIALES. Una iniciativa destinada a los más jóvenes. Queremos invitar a los niños a que salgan a la calle, despertar su inquietud y curiosidad por el mundo y que vengan y nos cuenten historias. Aquellas que más nos gusten las publicaremos a final de cada mes en nuestra web y redes sociales. Esta es una de las decenas de cosas que vamos a realizar, y siempre desde la humildad, el trabajo y con mucho corazón», relata Blanca Llácer, diseñadora gráfica. «Porque como dice una de nuestras frases favoritas. Solo con el corazón se puede ver bien, lo esencial es invisible para los ojos».