Política

Valencia

Un discurso sin grandes anuncios para dar continuidad al Botànic

Puig expone el acuerdo programático del acuerdo de Gobierno en una intervención en la que defiende los pactos

El presidente de la Generalitat en funciones, Ximo Puig, durante su discurso de investidura que duró poco más de 50 minutos
El presidente de la Generalitat en funciones, Ximo Puig, durante su discurso de investidura que duró poco más de 50 minutoslarazon

Puig expone el acuerdo programático del acuerdo de Gobierno en una intervención en la que defiende los pactos

El discurso que pronunció ayer el presidente de la Generalitat en funciones, Ximo Puig, tenía un único objetivo. Dejar bien claro a Compromís y a Unides Podem- EU que el acuerdo programático en el que llevan trabajando semanas los negociadores del Botànic II será la base del próximo Consell.

La prueba está en que los anuncios realizados están recogidos en el documento pactado. Las únicas notas de color fueron las referencias a Winston Churchill para definir la política: «Este es un trabajo en el que nunca se tiene éxito» o a Manuel Azaña: «No odiéis ni os apartéis de la política porque sin ella no nos salvaremos. Si la política es el arte de gobernar al pueblo, hagamos todos política, y cuanta más mejor».

Defendió la necesidad de llegar a acuerdos, «pactar no es traicionar» e hizo una llamada de atención a todos los gestores políticos: «Los ciudadanos nos han elegido para intentar resolver los problemas, no para provocar más problemas. Esa es una señal de respeto que les debemos, y que no hemos de olvidar nunca».

Fue una intervención sin grandes anuncios en las que Puig asumió los nuevos seis ejes que guiarán la acción del Consell e hizo un repaso de los principales compromisos de cara a la próxima legislatura.

Comenzó su intervención refiriéndose a Beatriz, la última víctima de violencia machista, asesinada en Alboraya, «la número mil», para pedir denunciar que este crimen no es una cuestión doméstica, sino de toda la sociedad. Así, anunció la convocatoria inmediata del Pacto Contra la Violencia de Género para «reafirmar e intensificar el combate común por la dignidad».

Presumió de los logros alcanzados en la primera legislatura del cambio, aunque admitió que existe un largo camino por recorrer. «Tenemos un 14 por ciento de paro, precariedad laboral, listas de espera, se siguen produciendo desahucios, hay barracones, pobreza infantil y sufrimos una financiación injusta».

Sobre estos fallos, se comprometió a que el paro se reduzca al diez por ciento y a mejorar la renta per cápita de los valencianos para que se acerque a la media nacional. También dijo que su Consell trabajará para erradicar la pobreza infantil, para luchar contra el cambio climático y por un Estado de Bienestar que sea «sostenible, eficiente y solidario».

Llamó también la atención una alusión a la unidad de todos los valencianos. «Somos de Vicent Andrés Estellés y de Miguel Hernández, somos del norte y del sur, hablamos castellano y valenciano», frase con la que recibió uno de los pocos aplausos de su intervención.

Pactos y leyes

Entre las principales medidas concretas destaca en materia económica un Pacto Social por la Innovación y Plan de Garantía Social y Ocupación Digna. Además, vinculó a la apuesta por la FP la mejora de la calidad del empleo.

También hizo especial referencia a las medidas que tienen que ver con el cambio climático. Será esta legislatura en la que se cree la prometida Agencia Contra el Cambio Climático, así como una Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica. Vinculada a estes objetivo se aprobará una Ley de Economía Circular y otra de Bienestar Animal.

En materia social confirmó la creación de una oficina para controlar las listas de espera, la gratuidad de la educación de cero a tres años, así como el impulso a los alquileres sociales.