Presupuestos autonómicos

Cs fía el acuerdo de presupuestos a que Cifuentes baje el IRPF

No se sentarán a hablar de los números de 2018 hasta que el PP plantee una rebaja de impuestos. La Comunidad pide a Aguado que actúe con «rigor» y le recuerda que la bajada de tipos está incluida en su programa electoral.

Cifuentes y Aguado en un pleno de la Asamblea de abril de 2016
Cifuentes y Aguado en un pleno de la Asamblea de abril de 2016larazon

No se sentarán a hablar de los números de 2018 hasta que el PP plantee una rebaja de impuestos. La Comunidad pide a Aguado que actúe con «rigor» y le recuerda que la bajada de tipos está incluida en su programa electoral.

La aritmética parlamentaria está provocando esta legislatura que cada apoyo en la Asamblea valga oro. En Ciudadanos lo saben y, en consecuencia, ayer decidieron volver a poner a la presidenta regional entre la espada y la pared con una propuesta que, de materializarse, dará una alegría al bolsillo de todos los madrileños casi con efecto inmediato: el año que viene. El portavoz de la formación naranja, Ignacio Aguado, retomó el curso parlamentario con la intención de sacar rédito a la buena situación macroeconómica en la que, dijo, se encuentra la Comunidad de Madrid. «No nos vamos a sentar a negociar los Presupuestos de 2018 si Cristina Cifuentes no se compromete a reducir el IRPF a todos los madrileños», anunció el portavoz de Cs que recordó que la región lleva 14 trimestres seguidos creciendo, que Madrid es un referente de inversión, y que el crédito de la Comunidad también sigue en aumento. «No vamos a esperar al último año de legislatura para ver si pueden engañar a los últimos indecisos. No creo en las zanahorias como el señor Montoro», añadió.

En Ciudadanos, explicó Aguado, han echado cuentas. Esperarán, eso sí, a que Cifuentes acceda a rebajar el tramo autonómico del citado impuesto para empezar a hablar de números. «Hay margen, las previsiones del segundo trimestre es que Madrid creció un 3,4%, tres décimas más que la media nacional. Es el momento de poner en marcha políticas de alivio fiscal. Hay posibilidad de seguir recortando en grasa de administración, en burocracia...», recordó el portavoz de Cs que insistó: «Cuando se puede hay que hacerlo, el momento es ahora». Primero, quieren en Ciudadanos, será el IRPF. Después llegará el turno de Sanidad, Educación y las políticas sociales: «Donde no vamos a aceptar que se produzcan recortes es en lo esencial», insistió Aguado.

Así, una rebaja fiscal será condición sine qua non para el PP si quiere garantizarse los apoyos de los 17 diputados de Ciudadanos en la aprobación de las cuentas para 2018. Las mismas que este año les mantuvieron en vilo hasta el último minuto aunque por causas bien distintas (la presencia o ausencia de dos diputadas populares que estaban de baja). «De lo contrario no nos sentaremos a negociar y tendrá que buscar otro grupo parlamentario para sacarlos adelante», añadió el representante de Cs.

El reto de Aguado provocó la reacción del Partido Popular que tildó la propuesta de «golpe de efecto infantil propio de partidos políticos que no actúan con rigor». «Ellos no tiene que pedirnos esto porque el compromiso de bajar el IRPF esta legislatura ya estaba en el programa con el que el PP se presentó a las elecciones», aseguró en declaraciones LA RAZÓN el portavoz de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido.

Desde el Ejecutivo de la Puerta del Sol recordaron que Ciudadanos no llevaba ninguna bajada de impuestos en su programa y que, en el punto número 21 del acuerdo de investidura que rubricaron Cifuentes y Aguado en 2015, los populares se comprometían a no realizar ningún tipo de subida hasta 2019. No se habló, dicen, de bajada. «Los 300 puntos del programa se van a cumplir, pero sin condiciones previas, por el interés general de los madrileños y no pensando en nuestros tiempos políticos o los de Ciudadanos», insistió Garrido.

En el Partido Popular se niegan a que les marquen la agenda desde la formación naranja. Apuestan, explicaron las citadas fuentes, por esperar a que se formalice la reforma del Sistema de Financiación Autonómica para, antes de poner en marcha cualquier rebaja del IRPF, confirmar si dicha modificación va a afectar a las competencias autonómicas en materia recaudatoria. «Hay que ver los momentos oportunos», aseguró Garrido que también creyó conveniente esperar a que el Gobierno de Rajoy dé luz verde a la anunciada rebaja de impuestos a las rentas más bajas para saber en qué medida afectará ésta a la recaudación que ingresen las arcas regionales. «Si Ciudadanos quiere alinearse con el PSOE y Podemos para bloquear los Presupuestos de 2018, que lo diga abiertamente y no haga demagogia», añadió Garrido que insistió en que Madrid es ya, y gracias a las políticas que ha puesto en marcha el PP en anteriores legislaturas, la autonomía cuyos ciudadanos disfrutan de unos tipos impositivos más bajos.

La rebaja de impuestos es sólo la causa del último enfrentamiento entre ambas formaciones que se acusan mutuamente de «posturear». En su comparecencia, Aguado recordó que otras medidas incluidas en el acuerdo de investidura, como por ejemplo la limitación de mandatos, o la Ley de Incompatibilidades continúan paralizadas en la Asamblea.