La Comunidad, sobre los semáforos de la A-5: «Los atascos van a ser infinitos»

El grupo municipal del PSOE-M ha votado este martes en contra de la paralización del plan para convertir la A-5 en una vía urbana y de la retirada de los semáforos. Una postura que choca con la del secretario general del partido en la Comunidad, José Manuel Franco.

“Cualquier medida que tenga que ver con los autobuses interurbano, el interlocutor no es el Ayuntamiento de Madrid, sino el Consorcio”, advirtió ayer el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Pedro Rollán, tras la reunión del consejo de Gobierno.

Rollán hizo esta puntualización al proyecto del Gobierno de Carmena de querer convertir una autovía en vía urbana un tramo de 11 km, entre Cuatro Vientos y Batán que contempla también la creación de un Bus Vao y un radar de tramo.

Rollán criticó la política de movilidad de Carmena e instó al Ayuntamiento a posponer la instalación de semáforos después de que tanto el PP como el PSOE y Ciudadanos se hayan mostrado en contra de la medida que provocará un incremento de atascos del 360%, según las propias previsiones municipales. “Habría que posponer la instalación de semáforos porque los atascos van a ser infinitos y va a generar un empeoramiento de la calidad del aire”.

El PSOE municipal desafía al Regional

Un “alto en el camino” y no la paralización inmediata que ayer exigía el secretario general del PSOE-M José Manuel Franco. El grupo municipal socialista ha desafiado a su dirección regional y ayer no reclamó que no se ponga en marcha la señalización semafórica en el Paseo de Extremadura en su transición a vía urbana sino tan sólo la creación de una mesa de trabajo para analizar su implantación. De hecho, la propuesta del PSOE madrileño ha sido tan ambigua que Ahora Madrid ha votado a favor al considerar, en palabras del delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, que aseguró que no supone retraso alguno a la puesta en marcha de la segunda fase del proyecto que prevé instalar los semáforos en enero de 2019. Además, Calvo se mostró a favor de crear una mesa de trabajo entre los colectivos y administraciones afectadas, “siempre que quieran alcanzarse consensos”.

Durante el debate, el delegado de Desarrollo Urbano Sostenible no dudó en pedir coherencia al PSOE-M y decidió considerar tan sólo el “apoyo” de los socialistas y sus afirmaciones en el pleno municipal y no las palabras de Franco, que ayer afirmó que, “si debe paralizarse el proyecto, que se paralice. No vamos a dejar abandonados a cientos de miles de ciudadanos que tienen que usar diariamente esa vía de acceso a Madrid”. En cambio, a la hora de intervenir, el grupo socialista en vota del concejal Chema Dávila – que después declinó hacer declaraciones a los medios- aseguró que no están en contra del proyecto sino que critican que Ahora Madrid no ha cumplido con lo que prometieron cuando aprobaron su propuesta en mayo de 2016, al reclamar que no se había hecho declarado la protección acústica en el Paseo de Extremadura, entre otras cuestiones. Así, en la propuesta socialista se instaba al Gobierno municipal a “abrir un proceso de diálogo con todas las administraciones públicas implicadas a fin de elaborar un plan alternativo de movilidad de transporte público y privado”.

Por su parte, tanto el PP como Ciudadanos han criticado la falta de coherencia del PSOE en el consistorio y criticaron que no hubieran votado a favor la propuesta de los populares, que sí contó con el apoyo de Ciudadanos, para pedir la paralización del proyecto de hacer la A-5 vía urbana en el Paseo de Extremadura.