Empresario del ocio nocturno y dueño de 1.735 plantas de marihuana

La investigación comenzó en la ciudad de Madrid a altas horas de la madrugada. La Policía dio el alto a un lujoso todoterreno que conducía un conocido empresario del mundo de la noche madrileña. Tras registrarlo encontraron, además de 600 euros, pequeños envoltorios de plástico sellados con marihuana en su interior lo que hace suponer que estaban preparados para su comercialización. En total, se incautaron de unos 700 gramos de esta droga. El empresario fue detenido, pero la investigación continuó a cargo de los agentes de la Udyco de la comisaría general de Policía Judicial.

Los agentes de la Policía Nacional se trasladaron a su domicilio y chalet de varias plantas situado en una lujosa urbanización en el municipio de Villaviciosa de Odón. En su interior, los agentes encontraron una auténtica plantación de marihuana y un laboratorio con lo necesario para extraerla y dosificarla. El sótano del detenido había un total de 1.735 plantas de esta droga distribuidas en diferentes estancias en función de su nivel de crecimiento.

Toda la planta baja del chalé estaba dedicada al cultivo de marihuana, aislada y con una sofisticada maquinaria térmica, lumínica, de ventilación y de riego para optimizar al máximo el crecimiento de las plantas. Además, los agentes se incautaron de seis frascos de cristal con 1,9 kilos de polen de marihuana y más de medio kilo de cogollos de esta droga ya extraidos de su planta. El propietario del chalé fue arrestado como presunto responsable de un delito contra la salud pública, que además contaba con un revólver y una pistola detonadora.

Operación en la Cañada Real

Pero ésta no es la única operación contra el narcotráfico efectuada en Madrid en los últimos días; la Policía local informó ayer de que Agentes de la Policía Municipal confiscaron en una operación en la Cañada Real dosis de cocaína, heroína y marihuana que habrían alcanzado los 7.000 euros en el mercado, así como un spray de pimienta y una defensa eléctrica tipo «taser». Mientras los agentes realizaban un servicio de vigilancia en la zona de la Cañada Real observaron cómo tres individuos se bajaban de un vehículo de alta gama y entraban en varias viviendas. Los agentes esperaron a que salieran para darles el alto.

Los individuos mostraron a los agentes unos envoltorios con un pequeño contenido de droga y manifestaron que era para su consumo. Sin embargo, tras registro más exhaustivo de las tres personas y del vehículo se incautaron de 29 gramos de cocaína, que se podía haber convertido en 600 dosis de base de coca. Preparado para su consumo fumado podría haber adquirido un valor de unos 6.000 euros. También encontraron 100 dosis de heroína, aproximadamente, 1.000 euros, y ocho gramos de marihuana