La Comunidad de Madrid y los rectores ayudarán a universitarios sin medios con buen expediente

El Gobierno de la Comunidad y los rectores de las universidades públicas madrileñas han acordado hoy tomar todas las medidas necesarias para que no haya alumnos con buen rendimiento académico que puedan quedar fuera de los estudios universitarios por falta de recursos económicos.

Este es el principal acuerdo del encuentro mantenido por el presidente regional, Ignacio González, con cinco rectores universitarios, que la consejera de Educación, Lucía Figar, ha calificado de "franco y cordial", a pesar de que los dirigentes de los centros han abandonado la sede de la Comunidad sin hacer declaraciones a la prensa.

Tras el encuentro, que ha durado una hora y media y se ha producido seis días después del anuncio de subida de tasas universitarias en las universidades públicas de Madrid, Figar ha negado que los rectores se hayan ido "enfadados"de la reunión, aunque ha agregado que eso no significa que haya habido "unanimidad o consenso en cómo ve cada uno la situación".

Han asistido a la reunión el rector de la Universidad Complutense, José Carrillo; de la Politécnica, Carlos Conde; de la Rey Juan Carlos, Fernando Suárez; de la Carlos III, Daniel Peña; y de la Universidad de Alcalá, Fernando Galván; mientras que el de la Universidad Autónoma, José María Sanz, no ha asistido por encontrarse fuera de Madrid.

La consejera ha destacado la "lealtad institucional de los organismos rectores, no comparable con algunos pirómanos sociales que desean que haya conflicto en todos los lados", como ha dicho que sucede, por ejemplo, en Sanidad.

Según Figar, el Gobierno ha trasladado a los dirigentes de las universidades la "dificilísima situación económica"de la Comunidad y el "ajuste brutal"presupuestario de 2.800 millones de euros, que obliga a la Administración regional a "apretar el cinturón en todas las políticas públicas".

Pese a este ajuste, ha continuado la consejera, el Ejecutivo ha asumido las "deudas inmensas"de las universidades públicas Complutense y Politécnica, destinando 78 millones del plan de pago a proveedores, en una muestra de "apoyo"a los estudios universitarios públicos.

Figar ha subrayado que los estudiantes universitarios pueden acceder a diversos mecanismos para abonar el coste de sus matrículas, como el pago fraccionado, el programa de becas de excelencia de la Comunidad o las que concede el Ministerio de Educación.

Esto demuestra, ha continuado, que en la universidad pública madrileña hay "una serie de instrumentos razonablemente puestos para garantizar la igualdad de oportunidades".

Sin embargo, la titular de Educación ha reconocido la "preocupación común"del Gobierno y los rectores por que algunos alumnos "queden fuera"de sus estudios universitarios al no poder pagar la matrícula, por lo que la Comunidad y los rectores trabajarán en conjunto, analizando "uno por uno"estos casos, si llegan a producirse.

Figar ha señalado que el objetivo de ambas instituciones es que se repitan las cifras del pasado curso académico en el que, según ha apuntado, hubo 800 alumnos más de nuevo ingreso y 1.400 becarios más, frente a las 8.000 primeras matrículas menos que hubo en Andalucía.

La consejera ha explicado que de los 188.000 alumnos de grado que estudian en las universidad públicas de Madrid, más de 60.000 están bonificados o eximidos del pago de tasas, lo que representa el 30 por ciento de las matriculaciones.

Sin embargo, ha reconocido que se producen algunos casos en que los alumnos no puedan pagar las tasas, y en concreto ha señalado que el curso pasado hubo 70 alumnos que no pudieron abonar sus matrículas, cuyo caso se estudiará detenidamente.

La consejera ha explicado a los rectores las dificultades económicas de la Comunidad, que ha visto reducida la asignación del Estado en mil millones de euros por un "diabólico sistema de financiación", al que se unirá el objetivo de déficit asimétrico donde "se prevé"que Madrid reduzca aún más sus fondos.

Estos datos, ha señalado, son los que han hecho que el presupuesto en Educación se haya reducido en 2.800 millones de euros y que la universidad haya recibido el pasado curso unos 25 millones menos de asignación por parte del Gobierno regional, lo que podría volver a ocurrir en el próximo año de no cambiar el escenario presupuestario.