Tres heridos graves por accidentes con braseros eléctricos

El de ayer fue un día negro para el recuerdo de Aranjuez, porque, al escabroso capítulo de esa madre que se suicidó tras matar a su hija de cinco años, hay que sumar el incendio que, desde primera hora de la mañana, mantuvo en vilo a los vecinos de la calle de las Moreras.

Una vez más, el desencadenante del fuego fue la incorrecta combustión de un brasero en el salón de la vivienda familiar de una mujer de 37 años y su hija de siete, quienes, hoy, tras haber sufrido múltiples quemaduras de segundo y tercer grado, siguen ingresadas en estado grave. En concreto, la madre, además de serias dificultades respiratorias, tiene heridas en el 25 por ciento de su cuerpo –especialmente en cara, manos y partes inferiores–; la niña, por su parte, presenta quemaduras incluso de mayor gravedad que las de su madre –sobre todo, en espalda, cara y manos–, por lo que tuvo que ser trasladada en helicóptero a la Unidad de Quemados de La Paz.

El centro de emergencias de la localidad recibió la primera llamada de alarma cuando aún no eran las 8:20 horas de la mañana, tras la que tres dotaciones de Bomberos de la Comunidad de Madrid se desplazaron hasta el lugar de los hechos para sofocar las llamas, que se habían apoderado con especial fuerza del salón de la vivienda de las que han sufrido las mayores consecuencias. No obstante, tuvo que ser atendida otra decena de personas por inhalación de humo y quemaduras, entre las que se encuentra el otro hijo de la mujer herida: un bebé de tan sólo dos meses de edad –el marido ha salido ileso del accidente, pues no se encontraba en casa cuando comenzó el incendio–.

Fuentes municipales del consistorio de Aranjuez han afirmado a Europa Press que los Servicios Sociales del Ayuntamiento se han puesto a disposición de la familia por si fuera necesario buscar una solución habitacional para ellos; igualmente, han descartado que se trate de un caso de pobreza energética.

También ayer, Alcorcón fue testigo de un suceso similar en la calle San Pablo, pues, a raíz del mal funcionamiento de otro brasero eléctrico, un varón de 32 años de edad tuvo que ser hospitalizado en estado grave, según informan fuentes directas del Summa, intoxicado por inhalación de monóxido de carbono.