Miras rehuye pronunciarse a favor de Sáenz de Santamaría en su visita a Murcia

La candidata a presidir el PP asegura que su único enemigo es Pedro Sánchez y los independentistas que le apoyan

A pesar de haberla recibido con todos los honores que se merece un líder nacional, el presidente de los populares murcianos, Fernando López Miras, evitó pronunciarse ayer sobre si apoyará o no a Soraya Sáenz de Santamaría en su carrera por conseguir la presidencia nacional del PP, y cedió el protagonismo de la decisión a los militantes, a pesar de que momentos antes, la exvicepresidenta aseguró ante los medios de comunicación que sus deseos para la Región de Murcia, son los mismos que el líder de la Comunidad repite sin cesar desde que Mariano Rajoy abandonó el Gobierno: agua, financiación e infraestructuras.

Todo parece indicar que, como adelantó ayer La Razón, el cabeza de los populares murcianos está más por la labor de acercarse al que fuera portavoz, Pablo Casado, que según algunos dirigentes de la Región tiene un perfil más acorde con la imagen de juventud que quiere darse a la formación en su renovación. En este sentido podrían entenderse las palabras que el propio Miras lanzó hace dos días a NNGG, cuando afirmó que hay que darle a los jóvenes las responsabilidades de la formación.

Aún así, Soraya Sáenz de Santamaría fue la primera aspirante que llegó a Murcia para hacer campaña, y fue recibida por numerosos cargos públicos y militantes que llenaron la sede del PP, acompañada por la ex ministra Fátima Báñez y el presidente regional. En ningún momento la candidata quiso entrar en polémica con respecto a los otros aspirantes, especialmente con Dolores de Cospedal y aseguró que su único enemigo es Pedro Sánchez que ha conseguido llegar al Gobierno apoyado por los independentistas.

Su apuesta para ganarse a los militantes pasa por «la modernización» de la organización, con la premisa de iniciar un periodo de apertura orgánica, donde se escuche a los militantes, a quienes quiere acercar las sedes del partido para recuperar la confianza de los ciudadanos.

Durante su intervención ante los medios de comunicación, Sáenz de Santamaría se mostró muy cauta con las encuestas sobre quien presidirá el PP y aseguró que las únicas que le interesan son aquellas que señalan que pueden ganar las elecciones, primero las municipales y autonómicas y más tarde las generales. Abiertamente manifestó que está convencida de que su candidatura y su programa son los que ayudarán a los candidatos de las regiones y de los municipios a ganar las elecciones y recuperar el Gobierno de la nación.

La exvicepresidenta no quiere entrar en una guerra de ataques a sus contrincantes, a algunos de los cuales les ha ofrecido llegar a acuerdos. Por eso ha basado su campaña en lanzar mensajes positivos que enganchen al mayor número posible de afiliados sin ataques a los que ella misma señaló, «mis compañeros».

En su visita a Murcia, Soraya Sáenz criticó la «política de gestos» que está haciendo Pedro Sánchez desde que llegó a la Moncloa y pidió al presidente del Gobierno que explique que «ha cedido a los independentistas y a los que quieren romper nuestro país».

También le pidió que en el tema de la inmigración «se deje de demagogias y frivolidades, porque es un asunto para tratar con muchísima seriedad, con humanidad, pero sin generar efectos llamada». En este sentido, le exigió que trate de la misma manera a los que llegan todos los días a las costas españolas.

Tras su reunión con los militantes, Sáenz de Santamaría recorrió las calles de la ciudad. Hoy llegará a Murcia la otra candidata, Dolores de Cospedal.