Política

Betis

Serra no descarta "una cuarta etapa"en el Betis "desde la responsabilidad"

Tercera despedida del balear del club verdiblanco marcada por sus diferencias con el vicepresidente José Miguel López Catalán

Serra no descarta "una cuarta etapa"en el Betis "desde la responsabilidad"
Serra no descarta "una cuarta etapa"en el Betis "desde la responsabilidad"larazon

Tercera despedida del balear del club verdiblanco marcada por sus diferencias con el vicepresidente José Miguel López Catalán

Reza el adagio que conviene tener a los amigos cerca y a los enemigos más cerca todavía. Al forzar sin resultados que lo justifiquen la marcha de Lorenzo Serra Ferrer -mito verdiblanco debido a que sus tres periodos "interruptus"se guardan en el imaginario bético como las épocas más gloriosas del club en el último cuarto de siglo-, la dupla conformada por Haro & Catalán ha precipitado sobre sus cabezas -metafóricamente- la espada de Damocles del balear, maestro jedi a ojos de la afición. "No pienso hoy en ser presidente del Betis. Ángel (Haro) es un presidente preparado, le tienen que ayudar en muchas cosas, pero hoy no pienso en esto. No descarto, desde la responsabilidad, tener una cuarta etapa en el Betis". Al mínimo tropiezo, la afición recordará la "amenaza fantasma"de Serra y la dirección del club no contará con ningún paraguas que haga de cortafuegos ante los malos resultados.

La tercera despedida de Serra Ferrer enlaza con la anterior por su ubicación. Pasado el tiempo, Serra parece más joven sin bigote, conserva la misma ambición de un Betis grande y ganador y se marcha más dolido, incluso, que con Lopera. "En su momento di un paso importante. No pienso en estos momentos desprenderme de mis acciones. Mis nietos son accionistas, para que se den cuenta de cómo se vive el beticismo en casa. No sé si participaré o no en las asambleas. No lo descarto. El presidente me ofreció las instalaciones para ofrecer mi mensaje, incluso se ofreció para estar a mi lado. Si lo he hecho aquí es porque no quiero comprometer a nadie ni quería utilizar las instalaciones del Betis aunque sea mi casa. Soy abonado, accionista y seguidor de los más fanáticos", señaló el de Sá Pobla.

Serra Ferrer llegó al hotel Al-Andalus con aire de Mio Cid, entre seguidores que se lamentaban por su salida. El día 20, le avisaron, la afición le hará un homenaje en la puerta de cristales. "Esto no va a quedar así, don Lorenzo", "candidatura"o "usted va a volver, pero como presidente", le señalaban los aficionados.

En su comparecencia quedó claro que las diferencias con José Miguel López Catalán, la mano que mece la cuna, eran ya irreconciliables. Ahora, "fútbol es fútbol", una vez más, el balón dictará sentencia.

Lorenzo Serra Ferrer, a quien el Real Betis rescindirá en los próximos días su contrato de vicepresidente deportivo, posee un 1% de las acciones del Betis, y aseguró que no se piensa "desprender"de esos títulos de propiedad que también pertenecen a sus nietos, ejemplo que puso "para que se dé cuenta la gente de cómo se vive el beticismo en casa", pues se considera "seguidor de los más fanáticos"del club.

El técnico mallorquín admitió que "con pena y tristeza"tomó la decisión "dar un paso al lado"porque no se "sentía a gusto por dignidad propia"con las nuevas condiciones de contrato que le ofrecieron, en la que sus responsabilidades menguaban y sus emolumentos se dividían entre tres.

En todo caso, Serra cree que "en estos dos años, se ha hecho un trabajo muy bueno estructurando una plantilla sólida", tarea en la que ha "tenido un protagonismo importante, pero otros también han colaborado", aunque reconoció que "hubo pérdida de confianza cuando"expresó "que Setién no aportaba para seguir creciendo y había que buscar un sustituto".En todo caso, el balear cree que "no se sostiene la explicación"que le han dado para justificar su cese, tras lo cual se le ha "venido el mundo encima, la decepción se traduce en algo más", por lo que lo "ha pasado mal", cuando él se limitó a "avisar a la comisión deportiva de que la situación estaba un poco descendente"."La crispación con la afición era un lastre. La Liga no estaba cerrada, el objetivo estaba cerca. Podíamos haber llegado a la cuarta plaza porque había una gran plantilla. Tras perder ante el Valencia y el Levante, pensaba que tenía que ser un punto de inflexión", indicó Serra sobre la mala racha del equipo bético en el tramo final de la temporada.

Serra calificó la propuesta de los consejeros delegados, Ángel Haro y Jose Miguel López Catalán, como "un golpe bajo doloroso", sobre todo porque "la discrepancia surge"cuando señala que "la situación deportiva no tenía un punto fuerte y fiable", lo que "era evidente"y ahí es cuando "Josemi toma la decisión de"apartarlo de sus funciones"."Es algo que no entiendo pero acepto con resignación", añadió un Serra para quien "esta salida es la más triste"de las tres que ha protagonizado en el Betis, ya que "en 2006 finalizaba un contrato y encontraba silencio e indiferencia tras jugar la Liga de Campeones", lo que constituyó "un hito".

Sobre la pregonada modernización de los métodos de trabajo, cree que "el Big Data es una máquina que ayuda, una herramienta útil, pero el ojo clínico es más importante"y por eso cree que "el presidente no suscribió los cinco o seis folios sobre lo que había hecho mal"que presentó López Catalán.

.Lorenzo Serra Ferrer cree que Ángel Haro "es un presidente brillante, preparado y hay que arroparlo"que se está "aproximando bastante a la idea de poner al Betis en la vanguardia. Con el trabajo de todos, en un tiempo récord se ha dado la vuelta a la situación".El ex vicepresidente bético recordó que "Quique Setién estaba contratado"cuando llegó y aunque "es verdad que le costó empatizar con el beticismo", lo que lo "ha penalizado", cree que ha hecho un "buen trabajo. Pero si te metes en contramano, eso no te ayuda".Por último, Serra aseguró que su sustituto, Joan Francesc Ferrer 'Rubi', "viene por los informes que la dirección aporta. Puede ser un buen continuador de lo hecho estos dos años", ya que "es un amante del buen fútbol, le gusta el talento pero con un punto de equilibrio, entiende que el fútbol es con balón y sin balón".