Consejos saludables para disfrutar del verano

El verano es una época del año que invita a pasar más tiempo fuera de casa, a hacer deporte, ir a la playa o a la piscina y, en esencia, a disfrutar del tiempo libre con amigos y familiares. Esto, sumado a las altas temperaturas, hace que tengamos que tomar algunas precauciones si queremos disfrutar de todo lo positivo de esta época sin poner en riesgo nuestro estado de salud. A continuación, ofrezco algunos consejos que seguro os ayudan a disfrutar al máximo de tus merecidas vacaciones sin comprometer su salud.

Cuidar la dieta

Lo primero y más importante, si en verano reduce la práctica deportiva, hay que ajustar lo que consume. A menor gasto calórico, menor debe ser la ingesta de calorías. Las frutas son ideales para esta época del año, ya que además de aportar una gran cantidad de vitaminas y minerales beneficiosos para el organismo nos ayudan a hidratarnos por su alto contenido en agua y sus azúcares nos aportarán energía para realizar cualquier actividad. Para individuos con problemas cardiovasculares se aconseja evitar los excesos, las dietas centradas en un mismo tipo de alimento (especialmente los ricos en vitamina K, que reducen los efectos de los anticoagulantes antivitamina K). En su lugar, se aconseja apostar por una dieta variada rica en fruta fresca, pescado azul, etc. (alimentos cardiosaludables), así como reducir o eliminar las grasas saturadas, el café, la sal, el alcohol y, por supuesto, dejar de fumar.

Hidratarse correctamente

Se recomienda un consumo de entre dos y dos litros y medio de agua embotellada, la corriente (especialmente si se viaja al extranjero) puede producir diarreas. En relación a la excesiva exposición al sol, si no nos hidratamos adecuadamente, puede aparecer una grave hipotensión o pérdida de conocimiento, por lo que el agua, una limonada, helados y refrescos pueden ayudarnos.

Ejercicio solo en horas de menor calor

El ejercicio es aconsejable durante todo el año, pero en verano todos debemos extremar las precauciones. En primer lugar, evitando las horas del día de más calor y, en segundo lugar, escogiendo deportes de menor impacto y que permitan mantener el cuerpo a buena temperatura y fresco (como la natación).

Pacientes de insuficiencia cardiaca u otras enfermedades crónicas deben evitar el ejercicio al aire libre en condiciones de mucho calor y humedad porque su corazón tiene una menor capacidad para eliminar el calor corporal.

Ropa adecuada

Vayamos a practicar deporte o no, es recomendable llevar prendas frescas, cómodas y transpirables que no nos den más calor y nos hagan sudar todavía más. También es aconsejable llevar gorros o sombreros que nos cubran la cabeza hasta las orejas para así evitar insolaciones. 

Modere la exposición al sol

Aunque tomar el sol es necesario para metabolizar la vitamina D, no debemos abusar de esta práctica y mucho menos durante las horas de calor más intenso (12 a 17:00 horas). Si nos gusta ponernos morenos, no hay que olvidar que debemos hacerlo de manera progresiva y siempre aplicarnos protección solar de manera recurrente.

Evite cambios de temperatura bruscos

Evitar someter a nuestro cuerpo a estos cambios bruscos nos ayudará a prevenir enfermedades, evitando así tener que estar en cama unos días durante nuestras vacaciones. Ajustando el termostato de nuestro aire acondicionado entre 2 y 4º por debajo de la temperatura ambiental no solo nos evitará resfriados, sino que además también estaremos ayudando al medio ambiente.

Proteja la salud de sus ojos

Cada vez es más habitual encontrarse con casos en los que las personas utilizan gafas de sol desconociendo si tienen el filtro reglado que protege nuestros ojos. Cuide sus ojos, no deje que una mala decisión dañe su visibilidad.

Proteja su pelo

El sol, la piscina y el mar resecan y desgastan su cabello. Por ello, se recomienda utilizar champús con protección solar. También productos protectores del calor –a menudo se utilizan para secadores, tintes o planchas de pelo– y aceites nutritivos para el cabello. Hay una gran variedad de marcas y precios. Si sigue estas pequeñas pautas ya no tendrá que preocuparse por la salud de su pelo.

Frene las infecciones

Una de las mejores formas para combatir el calor es ir a la piscina. El verano es una época en la que aumentan los casos de infecciones en ojos y oídos, ya que se transmiten rápidamente por el agua. También es común la aparición de hongos. También son frecuentes las infecciones intestinales. No beba agua que no sea potable. Lávese bien las manos y tenga cuidado con las salsas y las comidas con huevo. 

Combata los mosquitos

Evite los olores fuertes, es su gran factor de atracción. Tenga especial atención con su higiene personal y no utilice perfume. En cuanto a los productos repelentes, puede utilizarlos siempre y cuando esté atento a sus recomendaciones. Tampoco deje las luces encendidas y mantenga limpia la casa. No se olvide de cerrar bien la basura y tirarla diariamente.

Diga no al alcohol

No trate de hidratarse con bebidas alcohólicas porque no vas a conseguirlo. El motivo es muy sencillo: el alcohol contribuye justo a lo contrario, es decir, a la deshidratación.

Cuidado con el agua de la piscina

El agua de las piscinas lleva cloro. Procure cerrar los ojos cuando bucee, o al menos hágalo con unas gafas que le protejan.

Duerma bien

El cansancio es el mayor causante de la fatiga y la debilidad física. Para solucionarlo, procure beber mucha agua y dormir en un lugar ventilado.

Controle el estado de los alimentos

Los huevos, la carne, el marisco, etc. son solo algunos de los muchos alimentos que se deterioran con el calor. Asegúrese de que están en buen estado antes de consumirlos. Y ¡ojo! Cuidado con las cremas y la mahonesa, ya que en mal estado pueden causar intoxicaciones graves.

Más información: 91 446 00 00 / info@mundonatural.net / www.parafarmaciamundonatural.es