Ideal para niños que lleguen con un lingote de oro bajo el brazo

De todos es sabido que la llegada de un niño revoluciona al hogar. Sus padres, especialmente si es el primero, se desviven por la criatura y se centran en cualquier mínimo detalle que favorezca la salud del pequeño. La mayoría de las veces, incluso, muy por encima de, por un lado, las posibilidades económicas de los padres, y por otra, de las necesidades del recién nacido. Pero lo que hoy presentamos supera todos los límites conocidos.

Cualquier niño necesita una cuna. Generalmente, tiramos de aquella en la que se crió el sobrino o de esa otra en la durmió, lo justo, el hijo de tu mejor amiga. En otras ocasiones adquirimos una y, como en todo, hay tantos precios como colores. Pero nada supera a la estrella de la fiesta. Se hace llamar Dodo Bassinet Solid Gold Limited Edition y pasa por ser, y con todo el merecimiento, la cuna más cara del mundo.

Vayamos por partes, que si no el asunto se nos puede atragantar. La cuna en cuestión está realizada sobre la base de oro de 24 quilates y pesa la friolera de 188 kilos. Está diseñada por Ximo Talamantes, que asegura que “posee el espíritu conquistador de los sueños más preciosos”. La creación forma del exclusivo muestrario de la marca Suommo, especializada en artículos de lujo para bebés y mamás.

El precio de semejante cuna, solo al alcance de los padres con mayor patrimonio del mundo, es de 12 millones de dólares. Es más, por si a alguno le parece poca cosa están disponibles accesorios, como un adorno de diamantes y oro blanco, que cuesta 103.000 dólares más, mientras que el que prefiera un diamante y oro puro, tendrá que desembolsar 99.000 dólares adicionales.

No solo el lujo está en el exterior de la cuna, sino que el interior no desmerece en absoluto. De hecho, en las ropas de cama también se van unos cuantos miles de dólares. La seda salvaje natural, el algodón de pima y los bordados de hilo de oro también tienen parte de culpa.

Es evidente que la marca Suommo es una de las más exclusivas del mundo de los bebés. Si hay dudas, se quitan rápidamente observando el que seguro que es el chupete más caro de todo el mundo. Está fabricado en oro puro de 18 quilates y lleno de diamantes y cuesta 2,5 millones de dólares.