Así es un búnker de auténtico lujo para sobrevivir a cualquier catástrofe

DBX es una vivienda subterránea que garantiza la supervivencia de sus habitantes durante un plazo largo de tiempo con todos los lujos que puedas imaginarte. Esto es posible gracias a la experiencia de ABIBOO Studio en arquitectura espacial y en vivienda unifamiliar de ultra-lujo. Esta firma, americana y liderada por el arquitecto español Alfredo Muñoz, ya se ha embarcado en otros retos extremos como un proyecto arquitectónico de altura: una ciudad en Marte.

Para el búnker DBX, el equipo lo ha ideado todo: dispone de un sistema de abastecimiento de comida compuesto por cámaras frigoríficas para víveres y semillas de siembra, además de una bóveda de almacenaje con capacidad para 150 metros cúbicos de alimentos liofilizados envasados.

Esta experiencia hace que DBX no sea solo un refugio, sino que los huéspedes puedes disfrutar de este búnker como una segunda vivienda auto suficiente y con amplia relación con la naturaleza, tanto en el interior de la casa como en la amplia parcela sobre la que se implanta. Es decir, en este búnker podrás vivir desde largos periodos en caso de catástrofe o estancias cortas y de puro deleite, tanto para ti como para dos familias completas.

La construcción de la vivienda subterránea está fabricada a partir de módulos que rodean un jardín de cultivo hidropónico y actúa como un invernadero subterráneo. Tal y como nos cuentan desde la web de ABIBOO Studio, “la propuesta hidropónica permite aumentar la eficacia y reducir el mantenimiento. Este sistema requiere un menor uso de agua y espacio de cultivo, comparado con las técnicas basadas en suelo. Además, evita el uso de pesticidas. En total se destina al cultivo 120 metros cuadrados de superficie que estará iluminada las 24 horas del día con leds violetas, los más eficaces para soluciones subterráneas”.

Por otro lado, “la electricidad se produce a partir de un grupo electrógeno conectado a una reserva de combustible. DBX también dispone de apoyo energético mediante geotermia y acumuladores de biomasa. El generador carga 30 baterías de litio y permite tener electricidad de 12 a 120 voltios en todo el búnker. La geotermia es la encargada de hacer funcionar el sistema de aire de calefacción y frío.

Respecto al agua, desde AIBOO Studio afirman que “se extrae del subsuelo y pasa por un sistema de filtración y luz ultravioleta que mata las bacterias. La que se destina al consumo se almacena congelada”. Sobrevivir a una catástrofe en un búnker así es otra historia.