Ford

Máxima capacidad en un espacio de líneas elegantes

El Chevrolet Cruze mejora en su versión familiar

La versión SW del Cruze presenta una carrocería de línea moderna y con gran capacidad interior
La versión SW del Cruze presenta una carrocería de línea moderna y con gran capacidad interiorlarazon

La gama de Chevrolet se caracteriza por ofrecer automóviles que destacan por su utilidad. Productos realizados con la mentalidad del comprador que desea un vehículo que le sirva para su vida diaria y que no le dé problemas. Y que además resulte una opción económicamente conveniente, sin que ello suponga renunciar a una cierta belleza de líneas. Con este propósito llega la versión familiar, denominada SW en la nomenclatura de la marca, del modelo Cruze. Una berlina de tipo medio que ya se vende con otras carrocerías de cuatro o cinco puertas y que, con esta opción de mayor capacidad, supone una solución ideal para las familias de varios miembros o para deportistas que necesiten transportar equipos voluminosos.

Este modelo está disponible con cuatro motorizaciones diferentes, dos de gasolina y otras tantas de gasóleo. Un bloque de gasolina de 1,6 litros da una potencia de 124 caballos y otro de sólo 1,4 litros llega hasta los 140 cv gracias a la labor de un turbocompresor. Para los que prefieren las opciones diésel, existe una primera oportunidad en un bloque de 1,7 litros y 131 cv y la estrella de la gama, que es el motor 2.0, que eleva su potencia hasta los 163 caballos. Una posibilidad que, en nuestra opinión, es la más adecuada, ya que se trata de una planta motriz que ofrece una gran comodidad de conducción por su suavidad y por su bajo par motor, que le permite una aceleración adecuada desde la parte baja del cuentavueltas.

Además se pueden conseguir con él unos consumos muy reducidos y, si el cliente lo desea, puede instalar una caja de cambios automática. En el capítulo del ahorro, las versiones gasolina pueden incorporar el sistema «start/stop», que para el motor en las detenciones.

Como siempre ocurre en los Chevrolet, las relación entre la calidad y el precio es uno de sus puntos fuertes. La factura de compra, según la versión elegida, oscila entre los 14.500 y los 19.900 euros y, a cambio de esta cantidad, el cliente adquiere un coche de cinco amplias plazas con una destacable terminación interior, una mecánica probada y robusta, un equipamiento similar al de las berlinas de las mejores marcas y se asegura un mantenimiento bastante económico. En cuanto al espacio, su maletero de 500 litros, sin abatir los asientos traseros, es más que suficiente para cargar los enseres de una familia numerosa o el equipamiento de los deportistas más exigentes.