Motor
Mercedes GLE 300d: un todocamino con carácter para todo la familia
Su potencia y la tracción total le proporcionan un comportamiento brillante en todos los terrenos
Elegancia y amplia capacidad interior con hasta siete plazas. Esas son las líneas generales del GLE 300d, un SUV de dimensiones contenidas, no enormes, pero donde cabe todo lo que queramos llevar y dotado de una mecánica robusta y brillante de casi doscientos cincuenta caballos Un coche para toda la familia, pero también para el uso diario con un equipamiento completísimo. Todo el prestigio de la estrella a partir de 67.000 euros.
Es una de las carrocerías más equilibrada de la marca alemana en la que destaca la estrella de la casa en la parrilla delantera que le da un aspecto impresionante. Y por dentro, parece que su carrocería es más grande de las dimensiones reales, ya que está por debajo de los cinco metros. Concretamente 4,92 metros, pero en este espacio ofrece la posibilidad de llevar a siete pasajeros o, si lo preferimos, plegar los dos asientos más retrasados y dejar un maletero de dimensiones impresionantes. Esta fila adicional para las dos plazas suplementarias eleva la factura en tres mil euros.
Aunque esta carrocería puede equipar diferentes mecánicas, nosotros tuvimos la ocasión de probar la 300d cuyo motor diésel de cuatro cilindros rinde una potencia de 245 caballos, que son más que suficientes para conseguir una sensación de conducción rápida e incluso deportiva. Quienes quieran otras alternativas puede optar por diferentes versiones con otra numeración con diésel más potentes o con motores de gasolina de hasta 435 caballos y seis cilindros e incluso una versión híbrida enchufable. En todos los casos se instala siempre la tracción a las cuatro ruedas del tipo 4Matic y el cambio automático, de tipo convertidor de par y nueve relaciones. Estas características mecánicas le proporcionan eficacia en todas las circunstancias, incluso fuera del asfalto y además, le permite viajar muy rápido por carretera con un consumo medio que puede situarse en poco más de siete litros.
En el interior nos encontramos todo el refinamiento que podemos esperar en un Mercedes, con materiales de primer nivel, un diseño ergonómico y detalles de lujo como la iluminación del habitáculo o la regulación de los asientos eléctricos por un mando situado en el panel de la puerta. El conductor se encontrará con dos pantallas de 12 pulgadas que le muestran la instrumentación y la información tanto del funcionamiento del coche como del sistema multimedia exclusivo de la marca de la estrella. La elección de los datos se puede hacer bien con los mandos en el volante o directamente sobre la pantalla táctil.
Es de destacar el gran espacio que disponen los ocupantes de las tres plazas traseras, que pueden viajar cómodamente como en pocos SUV del mercado. La gran distancia entre ejes es lo que aporta esta ventaja. Las plazas de la tercera línea son un poco justas. Sirven para recorridos cortos y normalmente se deberían llevar plegadas para poder disfrutar de un enorme maletero de más de 630 litros de capacidad y muy aprovechable por sus formas cuadradas.
Como ya es una tradición en todos los Mercedes, el equipamiento de sistemas de seguridad y ayudas a la conducción es muy completo y destacamos entre ellos el de velocidad activa que detecta retenciones o tráfico lento, el de dirección activa, el de distancia respecto a los coches de delante, de frenado de emergencia para evitar riesgo de accidentes, detector de ángulo muerto, de asistente de maniobra con remolque…. entre otros.
Con el GLE Mercedes ofrece una alternativa de SUV urbano, capaz también de enfrentarse a cualquier recorrido en caminos de tierra o nieve con eficacia gracias a su tracción total, y que presenta un nivel de comodidad interior y de acabados al nivel de la mejor berlina de la casa alemana. Un coche para toda la familia que se disfruta asimismo en solitario.
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