Motor

Los coches ecológicos pierden fuerza en la crisis

Aumenta la participación en el mercado de los motores diésel mientras que reducen su peso los eléctricos e híbridos

La ausencia de impuestos a la gasolina y las subvenciones por la compra de coches eléctricos son las causas de la sangría
La ausencia de impuestos a la gasolina y las subvenciones por la compra de coches eléctricos son las causas de la sangríalarazon

En la crisis, las ventas de automóviles se han derrumbado en más de un 96%, pero otra de las características es que han perdido fuerza los coches ecológicos en beneficio de los motores movidos por combustibles tradicionales. De esta forma, mientras el diésel aumenta casi cinco puntos su participación en el mercado, los eléctricos e híbridos representan la mitad respecto a su cuota de mercado de marzo. En efecto, en marzo el 55,2% de los coches matriculados fueron de gasolina, el 24,8% diésel y el 20% restante correspondió a los automóviles de otras energías alternativas, ya sean eléctricos o híbridos de motores eléctricos o movidos por GLP o GNC. Sin embargo, un mes más tarde, mientras diésel y gasolina incrementan en casi cinco puntos su participación en el mercado, los automóviles de otras energías descienden su cuota hasta el 11,2%. La gasolina llegó al 59,7 y el diésel a 29,1.

Por lo que se refiere a cifran concretas, el encierro provocado por el decreto del estado de alarma ha hecho que dejen de matricularse alrededor de 4.250 unidades de vehículos eléctricos en las últimas seis semanas, según las estimaciones por la asociación de empresas que trabajan en el campo de la movilidad eléctrica. Concretamente, el parón de la actividad ha provocado que se matriculen en un mes lo que antes se matriculaba en un solo día. Las ventas de eléctricos puros de todo tipo en abril tuvieron una caída del 72,1% y un volumen de 414 unidades, de las que apenas un 20,7%, 86 unidades, corresponden a turismos, lo que supone un descenso del 86,3%.

En el campo de los vehículos eléctricos puros, el segmento de las dos ruedas es el que sale mejor parado de esta crisis, aunque redujo sus matriculaciones en más de un 15%. La razón es el aprovisionamiento de flotas de servicios de motosharing con la vista puesta en la desescalada. De hecho, la firma Silence Urban EcoMobility, del grupo Acciona, concentra más de 260 unidades matriculadas en abril.

Tras los resultados de los dos últimos meses, los empresarios de este sector han corregido a la baja sus previsiones de ventas para este año. Aunque se necesitaba terminar el ejercicio con unas 65.000 unidades, es decir, un incremento de ventas del +170% de vehículos eléctricos para ir cumpliendo las fases planteadas en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC). Pero el confinamiento y sus efectos económicos reducirán esta estimación hasta sólo unas 28.000 unidades, lo que supondría un aumento del +15% respecto al año pasado.

Pero estas previsiones pasan por la puesta en marcha de planes de incentivo a la demanda, que sirvan para insuflar confianza en el consumidor. En este sentido el reciente anuncio de un nuevo plan Moves será bien recibido gracias a la eliminación de la exigencia del achatarramiento para acceder a las ayudas o la flexibilidad para gestionar las adquisiciones por renting. En opinión de los directivos de esta industria de coches eléctricos, hace falta un plan global de choque urgente para contener el desplome económico y evitar la destrucción de empleo. De lo contrario, las empresas no tendrán confianza para invertir en la renovación de flotas. Este plan de incentivo a la demanda debe apoyar a todos los sistemas de propulsión y completarlo con medidas contundentes orientadas a que las empresas puedan proteger los puestos de trabajo y, con ello, la renta disponible porque, de lo contrario, la reactivación del consumo y de la propia inversión será complicada.