Inmigración

El Gobierno murciano exige que Cartagena tenga el control del Hospital Naval

La alcaldesa denuncia un amotinamiento de 80 inmigrantes en el campamento para impedir la expulsión de un compañero, mientras que Delegación lo desmiente

Hospital Naval de Cartagena
Hospital Naval de Cartagenalarazon

El Ejecutivo de la Región de Murcia va a reclamar al Gobierno de España la cesión al Ayuntamiento de Cartagena de las instalaciones del Hospital Naval que se encuentra en la ciudad portuaria, y que actualmente están ocupadas por el Centro de Estancia Temporal para Inmigrantes. Se trata, según ha dicho este jueves el portavoz del Gobierno regional, Marcos Ortuño, de una reivindicación que lleva meses pidiéndose, ya que en el mes de noviembre se formuló esta petición con el objetivo de que se "destine a usos que mejoren la situación de la población".

Se trata de una demanda puesta en marcha por el vicepresidente del Gobierno de la Región y consejero de Interior, Emergencias y Ordenación del Territorio, José Ángel Antelo, que ha llevado al Consejo de Gobierno y cuya propuesta también contempla la exigencia para que se incrementen los efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en el territorio de la Región de Murcia.

Ortuño ha recordado que en un principio, el Gobierno aseguró que iba a utilizarse esta instalación de forma provisional, "y no con carácter indefinido" como está ocurriendo.

El principal fin que se le quiere dar al Hospital Naval es con fines sociosanitarios, según el portavoz, "así como para otros usos que los cartageneros demanden".

El Ayuntamiento de Cartagena ya formuló al Gobierno de España la solicitud de cesión de las instalaciones del Hospital Naval, "sin recibir respuesta".

Por su parte, Antelo ha comparecido este jueves ante los medios vuelto para lamentar que no se haya recibido ninguna notificación sobre el CETI por parte del Gobierno central, por lo que ha denunciado una “irresponsable e inaceptable ausencia de lealtad institucional” que va en detrimento de la seguridad de todos los cartageneros, en especial de los que conviven diariamente en zonas de alrededor como Canteras, San Antón o en la barriada de Villalba.

“El Gobierno de Pedro Sánchez está incumpliendo todos los plazos que dio y todos los compromisos que quiso estrechar con los ciudadanos de la Región de Murcia. Todo esto es un fraude. Desde el Gobierno de la Región de Murcia vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para evitar la degradación de todo lo que viene a ser el pulmón de Cartagena, que es sin duda Tentegorra”, ha explicado.

Inmigrantes amotinados

Todo ello después de que la alcaldesa Noelia Arroyo haya denunciado un suceso ocurrido en la pasada noche en el campamento donde unos 80 inmigrantes se amotinaron para impedir la expulsión de un compañero “por razones que desconocemos” y en que sólo intervinieron agentes de la Policía Local, advertidos por los vecinos, “sirve para concluir que el recinto no está preparado para garantizar su propia seguridad interior”.

La regidora ha recordado que desde el Ayuntamiento se viene alertando al Ministerio de que la falta de información y coordinación con los servicios municipales y superar la capacidad del campamento de forma indefinida “podía generar problemas”, pues como explicó a los medios de comunicación “acumular a más de 700 personas en un campamento de forma indefinida no puede ser la respuesta de España a la inmigración, porque genera problemas de convivencia y tiene riesgos sociales”.

Además, ha indicado que del campamento ya han salido más de 1.400 personas sobre las que no se tienen datos. “Yo me pregunto, qué habría pasado en caso de que la Policía Local no hubiera acudido en apoyo a los vigilantes”, ha reiterado Arroyo.

Fueron los propios agentes locales de policía los que tuvieron que prestar apoyo a los vigilantes del campamento, calmar los ánimos de los amotinados, avisar a la entidad social responsable de las instalaciones y “escoltar al personal de la entidad hasta la Hospitalidad Santa Teresa, a donde fue trasladado el migrante expulsado”.

Noelia Arroyo ha pedido que la ministra se traslade a Cartagena para tratar sobre el campamento, “es injusto para los inmigrantes que conviven en unas instalaciones no adecuadas y para Cartagena, que somos la única ciudad que atiende los inmigrantes que llegan a la costa y a los que nos llegan por avión”.

El Gobierno lo desmiente

Por otra parte, la delegada del Gobierno en la Región de Murcia, Mariola Guevara, ha afirmado que el Hospital Naval de Cartagena, en el que se encuentran acogidos entre 600 y 700 inmigrantes, no sufrió este miércoles ninguna situación "preocupante" y que, por tanto, "no hubo ningún problema".

Ha explicado que el Ayuntamiento comunicó que la Policía Local tuvo que acudir a estas instalaciones después de que un vecino avisase al Cuerpo por "algo que escuchó". "Yo he hablado con los responsables que gestionan este centro y no hubo ningún problema", ha aseverado Guevara, que ha explicado que se trató de un asunto "de régimen interior" ante "algo que puede suceder habitualmente".

En este sentido, ha concretado que situaciones de esta índole se producen cuando los educadores deciden que "alguno de los chavales no debe de continuar ahí porque a lo mejor tiene alguna conducta inapropiada en un momento puntual".

Así, los educadores "consideran que es más correcto que abandone el campamento y lo trasladen a otra instalación, a otro albergue, nunca va a la calle", ha querido recalcar Guevara, quien ha indicado que el chico "tenía que abandonar esa noche el campamento y sus compañeros quisieron acompañarlo hasta la salida porque tampoco querían que dejara la instalación".