Lo de Trump

El presidente Trump anunció medidas arancelarias contra productos chinos. Ahora las autoridades de Pekín han ordenado subidas de aranceles para un conjunto de mercancías, bastantes de ellas agroalimentarias, procedentes de Estados Unidos. Este hecho no se queda en un problema bilateral, sino que puede afectar a muchas otras naciones, porque tendrá repercusiones en los flujos comerciales mundiales de productos agroalimentarios, que son muy sensibles. ¿Quién ganará esta guerra y cómo nos afectará a los españoles? Son dos incógnitas para las que no hay respuesta. Ni es la primera vez que escribo sobre Trump y me temo que tampoco será la última. Si solo la mitad de las cosas que se cuentan en el libro «Fuego y sangre, en las entrañas de la Casa Blanca de Trump», del periodista Michael Wolff, son ciertas, es como para echarse a temblar. Mientras tanto, una parte de las elites y de los ciudadanos norteamericanos están contra su mandatario. Se preguntan, lo mismo que hacemos otros muchos, cómo ha podido llegar a ser presidente de la todavía primera potencia del mundo. Otro tanto nos pasa en Europa. No lo entendemos, pero la realidad está ahí. Ya nos equivocamos una vez pensando que eso no llegaría a suceder y sucedió. A este lado del Atlántico desconocemos la psicología de los norteamericanos de a pie y del interior, que fueron los que apoyaron a Trump. Y, ¿si resultase que, a pesar de las que está perpetrando, estos últimos siguen a favor de su presidente? Es algo para pensar y para temer.