Navidad 2020

No necesita mucha argumentación afirmar que esta Navidad, siendo la misma de ayer y de siempre, tiene características que la hacen especial. Este año la incapacidad de reunimos con nuestros seres queridos para vivir juntos estas fiestas, como siempre hacemos, es lo que las hace diferente de otras.

Es así porque si por algo se singularizan estas entrañables fechas, es porque el vínculo familiar se refuerza y nos lleva a querer compartirlas con nuestros seres queridos. La familia es la institución natural en la que nacemos y que nos acoge por lo que somos, y no por lo que tenemos. En ella crecemos y adquirimos unos valores que, desarrollados a lo largo de los años, conforman nuestra personalidad y nos preparan para vivir dando sentido a nuestra existencia. Este sentimiento familiar es consustancial a nuestra condición humana al haber sido creados a imagen y semejanza de Dios. Un Dios que quiso encarnarse y nacer en el seno de una familia, la Sagrada Familia de Nazaret, que en estas fiestas recordamos de manera especial los cristianos y todos los hombres de buena voluntad.

En Navidad históricamente, hasta en las guerras se producía una tregua entre los contendientes, que incluso protagonizaban escenas de hermanamiento entre los situados en trincheras diferentes. Al fin y al cabo, si somos hijos de un mismo Padre Dios, todos somos hermanos. Para eso precisamente se encarnó y vino al mundo Jesús hace hoy 2020 años, y vuelve a venir con pandemia o sin ella. ¡Feliz Navidad a todos!