El Cuaderno de Chapu Apaolaza: Lo que a Pablo Iglesias le parece normal

Arde Barcelona y la coalición de Gobierno. Se nota el calorcillo. Todo en Sánchez se cumple de las maneras más impredecibles. Dijo el presidente que la Coalición iba a ser un Gobierno con una palabra y muchas voces, ¡y se oyen las voces desde la M30¡ La cuneta de la M-30 es mi Españita porque está alfombrada de trocitos de goma de los neumáticos, de tuercas, de restos de parachoques y de lo que cada cual va largando por la ventanilla. Hoy he soñado que allí había unos tipos que vacunaban con la de Moderna disparando con cerbatanas.

Cada cuál se monta su película o su serie. Sánchez ha recomendado una película a Pablo Casado. Empiezo a sospechar que los políticos hablan en películas y en series porque encuentran dificultades en expresarse con oraciones subordinadas. Otro ha puesto música de Pablo Hasel -raperillo de Tormes-, porque es más fácil montar un numerito que un discurso. En Podemos estrenan uno de estos días un espectáculo de flamenco fusión con rancheras mexicanas en el que canta Juan Carlos Monedero, que no es Juan Martínez, pero que se sabe que estuvo allí. Lleva por título ‘Venturas y desventuras de la nueva normalidad democrática en un banquillo del juzgado número 42 de Madrid. Variaciones de música y danza sobre sim, tinaja, neurona y niñera’. Años después del 15M, unos hechiceros encuentran en Galapagar un calendario Zamorano que dice ya es tiempo de resembrar el césped del jardín y donde encuentran conjuros para lidiar con la postpandemia y el ocaso de la nueva izquierda.

Vamos de la nueva normalidad a la normalidad democrática. Antes mirábamos lo que nos dejaba hacer el Ministerio Sanidad y ahora hay que pensar en lo que puede molestar al Vicepresidente del Gobierno. Lo que no es normal según Pablo Iglesias. Esto no es normal democráticamente, lo otro tampoco, y aquello, mucho menos. Hoy en la sesión de control a la oposición se ha quejado de que no hay control democrático de los medios de comunicación y yo creo que la democracia consiste justamente en que el poder político no controle los medios. También se queja de que hay tertulianos de izquierdas en la televisión, y lo dice él, que lo parió la Pachamama en una tertulia de televisión.

Se viene floreciendo la primavera y una interpretación peligrosa de la democracia que consiste en decir que lo que a uno no le gusta, no es democracia.

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