Finlandia

Las noches alegres y las mañanas tristes de Sanna Marin

«Marin ha pasado de ser definida por la prensa extranjera como “la Dama de hierro” a ser catalogada de “fiestera”»

La primera ministra finlandesa, Sanna Marin, podría aplicarse el refrán español de «noches alegres, mañanas tristes». Lleva una semana defendiéndose de las críticas por su querencia hacia el ocio nocturno. Los vídeos en los que aparece bailando y cantando deshinibidamente con otras «celebrities» finlandesas han dividido a la opinión pública entre los que creen que se trata de un comportamiento inapropiado para un jefe de Gobierno y los que defienden su derecho a bailar como una «millennial». Centenares de mujeres subieron vídeos bailando a lo «dirty dancing» como muestra de solidaridad.

La polémica ha subido un peldaño después de que la prensa finlandesa publicase unas imágenes en las que aparecen dos amigas suyas en «topless» en la residencia oficial en Helsinki, Kesaranta. Las fotografías se tomaron el pasado 10 de julio. Marin acudió el 9 de julio al festival de música Ruisock junto a unos amigos. Al terminar el concierto decidieron continuar en Kesaranta, un edificio del siglo XIX con vistas al Báltico. No está mal como «after». El selfie en el que las dos amigas aparecen besándose mientras una se tapa los pechos con un cartel oficial que pone «Finlandia» se tomó en el despacho que Marin utiliza para sus videoconferencias con líderes extranjeros. La primera ministra se disculpó por la fotografía, que reconoció que nunca se debería haberse tomado.

Desde sus comienzos en diciembre de 2019, Marin avisó de que no iba a ser una política clásica. En una entrevista en Vogue, la primera ministra más joven de Europa declaró que simplemente quería «ser honesta y ser ella misma». Marin defiende su derecho a tener una vida social y a pasar el tiempo libre con sus amigos. Personalmente no creo que haya ningún problema con que un político se divierta, otra cosa es cómo se divierta. La primera ministra ha estado esta semana más ocupada en defenderse de las críticas que en preparar el proceso de adhesión de Finlandia a la OTAN que debería consumarse a finales de año. Marin ha pasado de ser definida por la prensa extranjera como «la Dama de hierro» a ser catalogada de «fiestera». Al final tendrá que elegir entre ser una cosa o ser la otra.