Julián García Candau

Cuesta vender

Las agencias de colocación de futbolistas tienen a mano buen puñado de nombres muy interesantes, pero tropiezan con las cuantías de sus salarios. Del Madrid y Barcelona pueden emigrar varios jugadores muy interesantes. Su llegada costó sumas importantes y venderlos no supone ningún problema para sus finanzas. Aunque, naturalmente, la venta, el traspaso, no se puede cerrar por cifras similares a las que costaron. A los propietarios les salen las cuentas cuando cuentan los dineros de ahorro que significan sus altas fichas.

Madrid y Barça han puesto en el mercado varios jugadores. Hay dos razones que aconsejan la lista de transferibles: tienen mercado y necesitan hacer caja para los fichajes que tienen entre manos. En teoría es fácil hallar clubes dispuestos a llevarse a Villa, Higuaín, Di María, Coentrao o Alexis Sánchez. Lo complicado llega cuando los presuntos compradores analizan los dineros que perciben actualmente y que, naturalmente, no han pensado en reducir en su nueva etapa.

Madrid y Barça son ejemplos nefastos en el fútbol mundial porque invierten en fichas cantidades desorbitadas que ninguno de sus pares emplea. Hay casos en que un solo futbolista percibe salario superior al de medio equipo alemán, francés o italiano. La aparición de jeques y millonarios rusos impulsó a varios clubes hacia metas similares, pero el ejemplo no cunde cuando no están por medio los petrodólares. La pugna Barça-Madrid lleva a ambos a no apretarse nunca el cinturón. Y por ello han de ofrecer rebajas para aligerar la nómina. La crisis obligará a la contención salarial.