Descarga política

El informe de la Fiscalía sobre el caso Madrid Arena, quita un peso político de encima al gobierno del Ayuntamiento de Madrid. Se pide al juez que instruye el caso, la apertura de juicio oral, al entender que no se puede llegar más lejos de donde se ha llegado, y mantiene la imputación para 15 de los 24 inicialmente imputados; entre los desafectados están cuatro importantes cargos del Ayuntamiento de la capital. Por eso, el miércoles, a la salida del pleno, había satisfacción en los rostros de los miembros del Gobierno municipal: el informe de la Fiscalía les había supuesto una enorme descarga de adrenalina política.

Me alegro personalmente por la desimputación de Antonio de Guindos, porque siempre creí en su trabajo honesto, honrado y de entrega, y las sospechas que llevaron a su imputación me parecieron injustas y arruinaron la carrera de un hombre fundamentalmente bueno, al que ahora la Fiscalía no encuentra sospechoso de haber actuado irregularmente. Por otro lado, no me extraña la desimputación de Fátima Núñez, y sí la del inspector jefe de la Policía Municipal, Emilio Monteagudo, no porque tuviera indicios sobre su culpabilidad en los hechos, sino porque las apariencias pintaban mal y su futuro quedaba muy comprometido.

Con estas desimputaciones se respira cierta dosis de alivio, aunque las peticiones de la Fiscalía deberán ser aceptadas finalmente por el juez instructor del caso. El momento procesal más importante del Madrid Arena, el juicio oral, va a coincidir, seguramente, con un periodo preelectoral o electoral el próximo año, y el caso puede tener distinta influencia política en función de que haya o no altos cargos de la administración municipal imputados.

El informe de la Fiscalía deja en situación muy comprometida al doctor Viñals y a su hijo, y señala claramente como responsable máximo de aquella tragedia del Madrid Arena al promotor del evento, Miguel Angel Flores, que sigue en la calle, y donde seguirá si en las próximas horas satisface la fianza impuesta por el juez. Hay cosas del corazón de la justicia que la razón no entiende.