Jugadores sin puntos

Está claro que en pocos días el Real Madrid ha conseguido enderezar la temporada ganando al Barça y al United; clasificándose para la final de Copa y para los cuartos de final de la Liga de Campeones. En lo deportivo, mejor imposible.

Pero la pasada semana, por desgracia, no todo fue fútbol en el Madrid. Estos últimos días se han conocido excesos automovilísticos de algunas de las estrellas del equipo, que, en coches de alta gama, se han ido dejando puntos del carné por el camino. La lista tiene al menos cuatro nombres: Essien, Özil, Benzema y Marcelo. Más allá de la ilegalidad cometida, nos encontramos con el mal ejemplo que están dando unos personajes con una proyección pública y con una polémica inevitable: ¿qué hacen los jugadores cuando terminan los entrenamientos? ¿se cuidan entre partido y partido? ¿son proporcionalmente responsables con sus contratos multimillonarios?

Los futbolistas tienen mucho tiempo libre y, aunque desde luego cada uno es dueño de su vida privada, un jugador que gana un dineral tiene la obligación de cuidarse fuera del campo. Son vidas deportivas cortas y muy bien pagadas. En el sueldo va también el cuidarse y el dar buen ejemplo como referentes sociales que son. Quizá por todo esto, ahora muchos que dicen no entender la disciplina de Mourinho en el vestuario, comiencen a entenderlo. Es imposible que un equipo como el Madrid funcione sin alguien que sepa poner orden en el vestuario. Y los hechos de la pasada semana fuera del campo lo demuestran.