Miguel Ors

Más tensión, sudor e inquietud

L10 «Match» nulo

Era de obligado cumplimiento ver el «match» entre Jordi Évole y Florentino Pérez. Aguijoneador y agresivo, como siempre, el «jab» de Évole; Florentino Pérez, escurridizo y con la prudente técnica del político que fue. «Me gusta la política», declaró casi «sensualmente» en el primer asalto FP. Entró en la política con sólo 28 años, sólo que ése no era su cuadrilátero. Dijo cosas sustanciosas: «Fichar a Figo, Zidane y Ronaldo fue un disparate necesario». O: «Acepto críticas, pero no las críticas de los que utilizan el bolígrafo o el micrófono como pistolas». Respecto a valores, dijo: «Mi valor es la normalidad». O: «En el palco del Madrid no se hacen negocios, se transmiten valores». Final del «combate». Entretenido. «Match» nulo.

M11 ¡Qué hijo!

Contra pronóstico, Rafa Nadal ha sido eliminado en Indian Wells por Dolgopolov. Ucraniano. Si de algo o de alguien soy forofo es de Rafa Nadal, la excelsa marca de la marca España. No medio mundo, pero sí parte de ese medio mundo sabe de la existencia de España gracias a Nadal. A sus 27 años tiene ya fustigado de lesiones medio cuerpo. No se duele. No se queja. No pierde el ánimo. Dependa ya del físico, pero su ambición y optimismo gozan de buena salud. Titán Nadal. No le deprimen las derrotas ni los vergajazos carnales. ¡Dios, qué divino es este hijo tuyo! Resucitará de nuevo, como casi siempre.

X12 Un par

Vetustillo o no, golear a un histórico como el Milan es siempre gesta. Lo del Atlético en el Calderón: 4-1. «El Atlético es un grupo de colosos con un par de botas y un par de cojones» (apócrifo, un vecino de localidad). Asentí con el pensamiento. Simeone, al final del partido: «En los cuartos, siete equipos extraordinarios y un equipo de sueño, (o para soñar), el Atlético». Diego Costa, por su pugnacidad, me recuerda cada vez más a Di Stéfano. Trabaja, trabaja y trabaja, y no se cansa, no se cansa y no se cansa, y rezuma, rezuma y rezuma orgullo y amor propio a toneladas. Admirado y admirable Cholo: has hecho del Atlético un admirable y admirado equipo.

J13 Barça

El Barça, como el Atlético y el Real Madrid, en los cuartos de final de la «Champions». Estupendo. Sobre el Barça, dos cosas: que le cuesta ganar más que antes y que Neymar evoca en mi memoria la figura de Curro Romero. Muy mágico y arrebatador como el torero cuando hace algo, pero poco comprometido con el equipo. Expone poco, es poco pugnaz y, obviamente, no rinde con arreglo a lo que ha costado y cuesta.

–Da la impresión de que juega con el pensamiento puesto en el Mundial y que tiene miedo a que le lesionen– dice un observador.

Pudiera ser.

V14 Incómodos

Mas y Messi: dos poderes incomodados. Al soberano y soberanista Mas le incomoda España, cuando es español, le guste o no, y a España debe cuanto es, le incomode o no. «Hay políticos que son fatales para la política, para su país y para ellos mismos» (de no sé quién). Por lo que a Mas respecta, ojalá la política, y a no tardar, le sea fatal sin freno ni marcha atrás: lo confieso con los cinco sentidos del sentido común y con el corazón, el mío, de un español nacido en Barcelona, ciudad a la que su corazón nunca ha dejado de querer y admirar. Barcelona no tiene culpa alguna de que de vez en cuando nazcan seres nefastos (para Cataluña) como el señor Mas.

Messi, o su padre, que a lo mejor es su papá y no él, quiere más y más dinero. «Una burrada de dinero» (mi hurón en el Barça). Lo quiere todo: el contrato más sustancioso del mundo, más los derechos de imagen sin compartir con el club, más las mamandurrias de las variables. Bolsillos insaciables, los suyos o los de su papá, que no lo sé. El caso es que por «culpa» de Neymar, alias «El Fisco», y las «obscenas» demandas de Messi o de su progenitor, el club que es algo más que un club regurgita fosquedad y embrollo.

–Qué bien para el Real Madrid, oiga: es que yo soy madridista.

Pues que usted lo disfrute.

S15 Tensión

La Liga, a partir de ahora, crecerá en tensión, y la tensión segrega inquietud y sudor. De ahí el parco 0-1 del Madrid en Málaga, y gracias, y el escueto 1-0 Atlético en el Calderón, y también gracias. A partir de ahora, en la Liga, se abren tres frentes de tensión máxima: el de los equipos que quieren ganarla, el de los equipos que pugnan por un puesto en la «Champions» y el de los equipos que pelean para no ser desahuciados.