¿Qué probabilidad tiene de ser imputada?

De indicios, mas bien de la ausencia de ellos , es de lo que depende la carrera política de Tania Sánchez. La supuesta portadora de la antorcha de la honestidad se encuentra sometida a la decisión del TSJM sobre la querella que le ha presentado el PP por supuestas actuaciones ilícitas en la contratación del Ayuntamiento de Rivas mientras era concejal. Esos supuestos delitos fueron cometidos por Tania al adjudicar a la cooperativa Aúpa, que gestionaba su hermano y al ampliar un contrato de servicios de 2008 a 2010 por valor de 425.000 euros para las clases de tenis de Rivas a la empresa Sports and Tennis cuando ella era coordinadora de Servicios al Ciudadano, su padre concejal de Deportes y, curiosamente, un técnico municipal era el apoderado de la empresa.

Ahora el TSJM tiene que decidir si admite a trámite la querella, lo cual sería razonable, ya que se cumplen los elementos de los tipos penales: Tania era autoridad administrativa y tuvo la posibilidad tanto de tomar decisiones injustas a sabiendas para prevaricar como también pudo, conforme a los artículos 428 y 32 del Código Penal traficar con sus influencias y derivar caudales públicos para favorecer a su hermano, siempre supuestamente. El hecho de que aparezcan su padre y su hermano generan dudas más que razonables para al menos iniciar la investigación. A partir de aquí el juez si ve indicios debería solicitar un suplicatorio para a la cámara regional –suplicatorios que suelen concederse siempre–, con lo que se la podría imputar por todos o algunos de los delitos querellados. Es un proceso lento que va a hacer que si Tania finalmente llega a ser candidata tenga que enfrentar las elecciones con una imputación por actuaciones corruptas, por lo que su carrera depende de indicios, tan sólo de indicios.