Movilización por la alternancia

A una semana para las elecciones en Andalucía parece seguro que el PSOE será, como en las últimas cuatro décadas, el partido más votado, según la encuesta de NC Report para LA RAZÓN. Sus 41/43 escaños le dejan, eso sí, lejos de los 55 de la mayoría absoluta y recogen el desgaste (-4/-6 parlamentarios) de una administración envuelta en la corrupción y con una gestión incapaz de haber sacado al territorio del furgón de cola en el Estado. El PP se mantiene como la principal alternativa con 26/29 diputados, pero con un retroceso de entre cuatro y siete. Ciudadanos no sufre por su colaboracionismo con Susana Díaz y crece de los 9 a los 15/17. Adelante Andalucía se beneficia de la lista conjunta de populistas y comunistas para subir hasta los 23/25 y Vox puede quedarse fuera. Con esta aritmética, Susana Díaz necesitará un socio con la extremista Teresa Rodríguez como principal baza, aunque el escenario preelectoral en el país y la falta de empatía podría complicar el futuro. La alternancia es un valor central de la democracia que la fortalece y dinamiza. El régimen clientelar socialista ha sido un dique insalvable, pero el elector de centroderecha está a tiempo de creer y de movilizarse para girar los goznes de un tiempo nuevo.