La hora más propicia para hacer deporte y lograr adelgazar

Durante el estado de alarma, son muchas las personas que se quedan en casa trabajando o cuidando de los niños. esto hace que las visitas a la nevera sean más habituales de lo normal y, por lo tanto, las posibilidades de aumentar de peso se disparan. Por ello, son muchos los ejemplos de gente que trata de hacer algo de ejercicio para mantenerse activo, combatir ese incremento en la ingesta de calorías o, los más disciplinados, aprovechen estas semanas de encierro para llevar una alimentación más ordenada y sana que, combinado con el ejercicio, les permita perder peso.

Pero hay un factor que hay que tener en cuenta y es la hora en la que se decide hacer deporte porque es cierto que el tono físico no variará si se hace a una hora u otra, pero el horario sí determina la actuvidad del metabolismo y por tanto a las posibilidades de que nos ayude a adelgazar, informa “Time”.

Así, la ciencia determina que para optimizar los resultados de los entrenamientos, hay que intentar ejercitarse por la mañana y, a ser posible, con el estómago vacío. Es la mejor manera de quemar la grasa almacenada. ¿La explicación? Es una cuestión relacionada con una cuestión hormonal.

Según explica Anthony Hackney, profesor en el departamento de Ejercicio y Ciencias del Deporte de la Universidad de Carolina del Norte, “en las primeras horas de la mañana, tenemos un perfil hormonal que nos predispone a metabolizar mejor de la grasa”.

Las personas tienen niveles elevados de cortisol y de la hormona del crecimiento durante la mañana, estos niveles influyen en el metabolismo, por lo que “extraerán más energía de las reservas de grasa”, añade Hackney. Con lo que, es una potencial ayuda a la pérdida de peso. De hecho, según un estudio realizado en 2012 por la Universidad norteamericana de Brigham Young desmostró que después de 45 minutos de ejercicio de moderado a vigoroso por la mañana reduce la motivación de una persona para comer.

Pero el ejercicio matinal tiene muchas más ventajas. Un estudio publicado en el Journal of Physiology descubrió que hacer ejercicio a primera hora de la mañana puede ayudar a cambiar el reloj biológico de las personas. Así ejercitarse a las 7 de la mañana provoca que el organismo esté más alerta desde primera hora y se cansará más temprano, por lo que se dormirá antes y le permitirá levantarse antes al día siguiente. Además, la práctica de deporte sirve para poner a la persona en alerta mejorar la salud mental, la productividad y reducir el estrés.

En cambio, Hackney advierte de que si la persona no es madrugadora y que le cuesta mucho ponerse en marcha a primera hora, tendrá muy difícil perder peso y lograr otros beneficios porque “el nivel de intensidad en la actividad física será tan bajo que no gastará demasiada energía”.