Tribuna

Un reto permanente culminado con éxito

El factor de cohesión más importante que tiene España es el mundo del trasplante

Imagen tomada durante el trasplante cruzado entre España e Italia, el cuarto internacional realizado en los meses de pandemia
Imagen tomada durante el trasplante cruzado entre España e Italia, el cuarto internacional realizado en los meses de pandemiaMinisterio de Sanidad/ONT

España es una referencia en el mundo de los trasplantes. La Organización Nacional de Trasplantes (con una ley de trasplante, cuyo artífice ha sido el profesor Romeo Casabona, catedrático de Derecho penal y doctor en Medicina, de las mejores del mundo), dirigida sabiamente hasta hace poco por el Dr. Matesanz, ha permitido encausar tanta generosidad de este pueblo (donantes) dentro de una sanidad de profesionales preparados y punteros que la hace una de las mejores del mundo.

Como profesional de la Medicina, Cirugía docente, trasplantes y representante de la Cámara alta como portavoz de Sanidad, me siento orgulloso de vivir en un país que durante más de 20 años seguidos es el primero en el mundo en donación y trasplantes.

Tener el sistema que tenemos sólo es posible gracias a ser un gran país que hemos dotado entre todos de un estado de bienestar único (pero difícilmente sostenible si no se hacen reformas) y que en estos momentos de Covid-19 tiene que ser reconstruido y enfocado más a la prevención que a la enfermedad. El principio constitucional de que tenemos 17 autonomías y dos ciudades autónomas no tiene nada que ver con que hayan 17 sanidades distintas. Necesitamos un Pacto por la Sanidad transparente y aprobado en las cámaras legislativas, que haga que nos dotemos de una cartera de servicios universal evitando duplicaciones, triplicaciones, etc., que sea financiado de forma conveniente para que todos los españoles vivan donde vivan tengas la misma oportunidad sanitaria en financiación y servicios.

Pero volvamos al mundo fantástico de la donación y trasplante de órganos. Hemos llegado al mayor número de donantes de la ONT y además sin «fallidos». España y los españoles superan ya en más de 20 puntos a la Unión Europea (UE) con una tasa de donación de 20 por millón de habitantes (PMH) y más de 13 puntos a EE UU con más de 26,6 (PMH).

Es verdad que el año 2020, con la crisis sanitaria más grande de la historia reciente por la Covid-19, ha disminuido el 23% de donantes y el 19% de los trasplantes, pero a pesar de todo seguimos siendo los primeros en el mundo.

Como norma general y de media en España se realizan 13 trasplantes diarios. «La vida en su máxima expresión».

En 2020 hubo 1.777 donantes (37,4 PMH), y en cinco comunidades autónomas, 50 (PMH). Por tanto, 4.425 trasplantados (93,3 PMH). Esto es posible porque cada donante puede donar uno, dos, tres, cuatro y hasta cinco órganos.

Se realizaron 197 trasplantes en niños, que representa por si solo un récord máximo en la historia de los trasplantes. Además, 433.350 donantes en el Plan Nacional de Médula Osea. Este año 23.365.

Los donantes en asistolia (corazón parado) han supuesto el 35% de la donación, que es un cambio sustancial en este mundo del trasplante. Se ha trasplantado de donante vivo 268 personas. 257 trasplantes renales y 11 trasplantes hepáticos.

Un cambio en la donación de varios años persistente es la causa cardiovascular y un 4,5 nada más de accidentes de tráfico. Solo el 1-2% de las personas que fallecen en un hospital es donante y se hace en la UCI-UVI, que es un punto clave en el mundo del trasplante. 2.700 trasplantes renales, 1.034 hepáticos, 336 pulmonares, 278 cardiacos, 73 pancreáticos y cuatro intestinales es un maravilloso palmarés de este extraordinario mundo de los trasplantes en España.

A pesar de todo, la lista de espera en España es de 4.889. Mirada de forma global y una negatividad de donar de un 14% (la más baja del mundo) la edad media es de 54 años. Hay registrado un aumento de donantes de 60 años y más y uno de 90 años. Es verdad que en los últimos 35 años se han ganado 15 años a la vida, milagro español con el que, conjuntamente con Japón, hemos conseguido que la expectativa de vida sea la más alta del mundo. Esto es otra historia de éxito permanente.

Debido a que seguimos apostando por la vida y a la investigación para dar segundas oportunidades, hasta ahora todo esto ha sido posible gracias a la generosidad de millones de españoles que se han marchado de este mundo dejando vida tras de sí.

El plan 50 por 22 de la ONT que dirige magníficamente nuestra compañera y amiga Beatriz Domínguez Gil, alumna destacada de nuestro también amigo el profesor Matesanz, es un maravilloso proyecto colectivo digno de encomio y apoyo.

El privilegio de poder tener una magnifica experiencia en el mundo del trasplante (más de 20 años) centrado en los pancreáticos, y que realizamos el primero de Canarias y ya llevamos 118, siendo el único servicio de la comunidad autónoma de Referencia Nacional de forma oficial, es algo único, y que en nuestra vida hay un antes y un después. Todo es posible gracias a un equipo enorme de personas, generalmente anónimas, que permiten que esto sea así con la ayuda de una sanidad pública comprometida.

Practicamos como «filosofía de vida» el humanismo activo y los trasplantes culminan esta forma de ver nuestro proyecto vital. Más allá de la convección religiosa se encuentran las creencias y el derecho a la vida. Dedicarse a los demás merece la pena. «No te lleves los órganos al cielo, allí no los necesitas», por todo ello queremos animarles a que donen. «Un país así, claro que tiene futuro».