Más casos graves

Una patología más grave que aumenta a la sombra de la pandemia

El diagnóstico del cáncer de mama se ha disparado en 2022 tras la falta de cribados y revisiones durante los peores meses de la crisis sanitaria

Radiografía del cáncer de mama
Radiografía del cáncer de mamaMiguel Roselló

La pandemia de la Covid-19 se ha llevado por delante la vida de millones de personas en todo el mundo y ha hecho tambalear los cimientos de los sistemas sanitarios a nivel internacional. Pero esas solo son las consecuencias visibles del SARS-CoV-2. Junto a ellas ha dejado, además, unos efectos ocultos que poco a poco comienzan a dar la cara. Es el caso, por ejemplo, del aumento de tumores que no pudieron diagnosticarse durante los meses más duros de la pandemia, cuando los hospitales cerraron a cal y canto y las revisiones y los cribados preventivos pasaron a un segundo plano.

Prueba de todo ello es que este año 2022 se espera que en España se diagnostiquen más de 280.100 casos de cáncer, lo que significa 3.861 más afectados que en 2021, según datos del último informe de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). Bajo ese gran paraguas, se estima que 34.750 de ellos serán cáncer de mama, lo que se traduce en un incremento de 4.375 más diagnósticos que en 2021, una cifra muy por encima del aumento habitual de los últimos cinco años, que rondaba de media los 500-700 casos más anualmente. Según los expertos, todo apunta a que la pandemia está detrás de ese crecimiento exponencial, ya que el cierre de las consultas especializadas y el aplazamiento de los programas de cribado durante 2020 han provocado el colapso de las consultas posteriormente, reduciendo así las posibilidades de diagnosticar muchos tumores que han dado la cara meses después, pero que lo han hecho de una forma más agresiva y con peor pronóstico, pues se han descubierto en estadios más avanzados.

Radiografía del cáncer de mama
Radiografía del cáncer de mamaMiguel Roselló

Tras el diagnóstico temprano de un tumor de mama hay razones para el optimismo, ya que la tasa de supervivencia en estos casos resulta altísima, hasta el punto de que supera el 85%. Sin embargo, de todos los nuevos carcinomas mamarios, entre un 5 y un 6% de ellos presenta metástasis en el momento del diagnóstico, lo que complica el abordaje, ya que se trata de una enfermedad incurable. Además, se estima que aproximadamente un 30% de las mujeres diagnosticadas en un estadio temprano acabará desarrollando metástasis años después de haber finalizado su primer tratamiento.

Por todo ello, aunque el cáncer de mama presume de un buen pronóstico y la calidad de vida de las afectadas resulta aceptable, tanto los oncólogos como las asociaciones de pacientes insisten, un año más, en reclamar mayor inversión para la investigación, pues se trata del único camino para que esas negras cifras de recaída y de metástasis se tornen en esperanzadoras, siendo sinónimo de curación o cronificación.