Hábitos
No es culpa de la almohada: el detalle antes de dormir que podría provocar los dolores de cuello
Este comportamiento añade hasta 27 kilos de presión sobre la columna vertebral
Cada mañana, muchas personas se despiertan con una molesta rigidez y dolor en la zona del cuello. La reacción más común es culpar a la almohada o al colchón, pero la verdadera causa puede estar en un hábito nocturno muy extendido: el uso del teléfono móvil antes de dormir.
El uso prolongado del móvil en posiciones incorrectas genera una tensión adicional en la zona cervical. Este fenómeno, conocido como 'cuello de texto', ocurre cuando inclinamos la cabeza hacia adelante para mirar la pantalla del dispositivo, añadiendo hasta 27 kilos de presión sobre la columna vertebral. Esta carga excesiva puede derivar en problemas posturales a largo plazo.
Además, recostarse de lado mientras se usa el móvil, con la cabeza doblada en una posición forzada, contribuye a una mayor tensión en los músculos del cuello y los hombros. Con el tiempo, esta postura inadecuada puede convertirse en un desencadenante crónico de dolor cervical.
Otras causas del dolor de cuello al despertar
Si bien el uso del móvil es un factor clave, existen otras razones que pueden provocar molestias cervicales al comenzar el día, como:
- Altura incorrecta de la almohada: Una almohada demasiado alta o baja desalineará la columna cervical, generando tensión.
- Dormir boca abajo: Esta postura obliga al cuello a girar de manera forzada durante horas, causando rigidez.
- Estrés y tensión acumulada: La falta de relajación muscular antes de dormir puede hacer que los músculos se mantengan contraídos durante la noche.
- Falta de soporte en el colchón: Un colchón inadecuado, ya sea muy blando o muy duro, puede afectar a la alineación corporal y generar presión en el cuello.
Consejos para evitar el dolor cervical al despertar
Para prevenir estas molestias, es recomendable adoptar hábitos saludables antes de dormir. Estas son algunas sugerencias:
- Dejar de usar el móvil al menos 30 minutos antes de acostarse, evitando posiciones forzadas al mirarlo.
- Mantener una postura neutra al dormir, siendo la posición ideal de costado con una almohada que alinee la cabeza con la columna.
- Realizar ejercicios de estiramiento cervical antes de acostarse.
- Aplicar calor o frío en la zona cervical si se siente rigidez al despertar para aliviar la inflamación y la tensión muscular.