Opinión

La invisibilidad de las mujeres

A las mujeres se nos ha invisibilizado y se nos invisibiliza en innumerables esferas de la vida. Esto es un síntoma más de que el poder es patriarcal, también en la ciencia, la investigación y la medicina

Mujer leyendo un libro con una taza de té en al mano
Mujer leyendo un libro con una taza de té en la manoLa Razón

A las mujeres se nos ha invisibilizado y se nos invisibiliza en innumerables esferas de la vida. Muy pocas son las vidas de mujeres relevantes vinculadas a la historia, la política, el arte, la literatura, la filosofía o cualquier esfera humana, sobre las se nos examinó en la Primaria, la Secundaria o el Bachillerato.

Esta no es una anécdota personal, es una constante. A las mujeres no se les estudia. Ni en las humanidades para entender la historia completa de la que procedemos como humanidad, ni tampoco en el presente de la ciencia, la investigación y la medicina, para garantizar el mismo nivel de calidad de vida y bienestar que a los varones.

Esto es un síntoma más de que el poder es patriarcal, también en la ciencia, la investigación y la medicina. Y se traduce en una colección de discriminación, desigualdad y violencia que va desde que se minimicen ciertas patologías más prevalentes en las mujeres hasta que se patologicen ciertos momentos de la vida de las mujeres, un ejemplo es el abordaje de la menopausia entre el tabú y la sobremedicación; se invierta menor esfuerzo terapéutico, declarando como normal lo frecuente, sin atajar el origen de la dolencia; tengan más probabilidades de ser mal diagnosticadas y que sus síntomas sean ignorados o infravalorados, o que prácticamente toda la investigación en salud se realice en hombres, incluyendo aquellas donde las mujeres soportan la mayor parte de la carga de la enfermedad, como el alzhéimer.

Pero no es cuestión de criminalizar a los sistemas de salud, ya que el problema es más profundo, es social, como demuestra una investigación canadiense sobre la menor posibilidad para las mujeres de recibir asistencia de reanimación cardiopulmonar durante un paro cardíaco extrahospitalario. Esta invisibilidad impide a las mujeres ser protagonistas de su salud y que obtengan atención médica adecuada y diagnósticos precisos.

Carmen Montón es embajadora Observadora Permanente de España ante la OEA y la OPS. Ex ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar social