Avances médicos

La mejora de vida de bebés prematuros, en Debate CaixaResearch

Es la principal causa de fallecimientos en niños menores de 5 años, según los datos de la OMS

Los progenitores se habían opuesto a que su hijo recibiera sangre de personas vacunadas contra la covid-19
Los progenitores se habían opuesto a que su hijo recibiera sangre de personas vacunadas contra la covid-19larazonARCHIVO

La supervivencia entre los neonatos prematuros extremos, aquéllos que han nacido antes de las 28 semanas de gestación, ha mejorado de forma significativa gracias a los últimos avances técnicos y médicos, hasta el punto de situarse entre el 75% y el 80% en los países desarrollados. Pero ésta se encuentra entre el 25 y el 75% cuando se trata de prematuridad más extrema, que incluye a aquellos neonatos nacidos en la semana 26 de gestación o antes y que son protagonistas ya de 25.000 nacimientos al año a nivel europeo.

Pero más allá de la necesidad de mejorar esa supervivencia, otro de los grandes retos en el contexto de la prematuridad es el de tratar de minimizar las secuelas en el desarrollo, especialmente frecuentes entre los recién nacidos prematuros extremos. El hecho de tener que sobrevivir y acabar de completar su desarrollo en un entorno hostil, fuera del vientre materno, puede provocar estrés en algunos de los órganos del bebé, como sus pulmones, su sistema nervioso, el corazón, los intestinos y los riñones, lo que es posible que acabe ocasionando graves secuelas en la edad infantil y adulta. De hecho, tal y como indican los últimos datos de la OMS, las complicaciones relacionadas con la prematuridad provocan un millón de muertes anuales en el mundo, siendo la principal causa de fallecimiento en niños menores de 5 años.

Así pues, entre los profesionales de la neonatología el gran reto es lograr mejorar la supervivencia de los bebés prematuros, pero también procurar que éstos sufran el menor número de alteraciones en su desarrollo. En este contexto, el próximo miércoles 17 se celebra el Día Mundial del Niño Prematuro y, coincidiendo con esta efeméride, la Fundación «la Caixa» organiza un nuevo Debate CaixaResearch en torno a esta temática. El doctor Eduard Gratacós, director de BCNatal, del Hospital Clínic y Hospital Sant Joan de Déu, y la doctora Adelina Pellicer, jefa de la Unidad de Neonatología del Hospital Universitario La Paz, ambos referentes en neonatología en España, intercambiarán conocimientos, experiencias y opiniones acerca de las causas de la prematuridad y su prevención así como también se referirán a los últimos avances e investigaciones en este ámbito.

En este sentido, el doctor Gratacós explicará en qué fase se encuentra y cómo avanza el primer proyecto europeo de placenta artificial, liderado por él mismo e impulsado por la Fundación «la Caixa», cuyo objetivo principal es recrear las condiciones en las que vive el feto dentro del vientre materno gracias a una placenta artificial que estará formada por una bolsa blanda fabricada con un biomaterial semitranslúcido, la cual tendrá un líquido caliente en su interior que replica las características del amniótico. Así, al nacer, el bebé prematuro se introduciría en esa placenta artificial y se conectaría su cordón umbilical a otro artificial y se conectaría su cordón umbilical a otro artificial a partir del cual se le transferiría el oxígeno, los nutrientes, hormonas y demás sustancias que, en situación normal, recibiría de la madre. Además, el proyecto ofrece la posibilidad de monitorizar al neonato de forma permanente y no invasiva a través de ecografías del flujo sanguíneo y el control de la presión arterial y la frecuencia cardíaca, así como contempla el uso de microsensores ubicados en el líquido amniótico o en el cordón umbilical, los cuales permiten controlar de forma continuada la salud del bebé.

Tras dos años de trabajo, los investigadores y desarrolladores del proyecto de la placenta artificial, que convive con otros tres de las mismas características en el mundo, ya han demostrado la prueba de concepto y , tal y como señala el doctor Gratacós, quien pone de relieve la dificultad de realizar la conexión extracorpórea al bebé a través del cordón artificial -algo que no se ha realizado nunca antes- “se puede hacer que un feto sobreviva fuera del útero materno durante horas”.