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La advertencia de un psicólogo: "Hay que saber diferenciar entre amor propio y ser un flipado"
En un entorno dominado por la comparación y el culto a la imagen, cada vez resulta más difícil reconocerse y aceptarse
En tiempos de filtros, selfies y validaciones a golpe de 'me gusta', el concepto de amor propio se ha ido desdibujando hasta confundirse con una imagen artificial de autoexaltación. Así lo plantea el psicólogo Adrián Chico, que ha encendido el debate en redes sociales tras publicar un contundente vídeo en TikTok en el que desmonta algunas de las creencias más extendidas sobre la autoestima.
Chico, conocido por su estilo directo y divulgativo, lanza una crítica a la tendencia creciente de asociar el amor propio con actitudes narcisistas. Para él, quererse no significa sentirse superior ni estar en una constante exhibición pública, sino reconocer con honestidad quiénes somos, con luces y sombras. "No se trata de repetirte que eres el mejor cada día, sino de convivir con tus defectos sin que eso te haga sentir menos valioso", explica.
Uno de los puntos más relevantes del mensaje del psicólogo es la fragilidad de una autoestima construida sobre pilares externos: el aspecto físico, el estatus laboral o la popularidad en redes sociales. Según Chico, esta forma de quererse está condenada al colapso en cuanto las circunstancias cambien. "¿Qué pasa si dejas de gustar, si te echan del trabajo, si ya no recibes aplausos?", se pregunta. En su opinión, una autoestima saludable debe poder resistir incluso cuando el entorno deja de validar.
En lugar de buscar constantes pruebas de valor fuera de uno mismo, Chico propone un camino mucho más sólido pero exigente: la autoaceptación. Esta implica reconocer tanto fortalezas como debilidades y, desde ahí, construir una relación compasiva y auténtica con uno mismo. "El amor propio no tiene nada que ver con creerse perfecto, sino con saber que se es digno de amor incluso con las imperfecciones a cuestas", afirma.
Este enfoque conecta con una corriente creciente dentro de la psicología contemporánea que pone el foco en la autocompasión, entendida no como autocomplacencia, sino como la capacidad de tratarnos con amabilidad en lugar de juicio constante. Según Chico, es desde esa base emocional que se puede dejar de competir con otros, de buscar validación externa o de vincular el valor personal a logros circunstanciales.
Además, señala que muchas de las crisis emocionales actuales tienen raíz en esta falta de amor propio real. En un entorno dominado por la comparación y el culto a la imagen, cada vez resulta más difícil reconocerse y aceptarse.
Lejos de ser un concepto superficial, el amor propio se perfila como una necesidad emocional urgente. "Quererse a uno mismo no es subirse a un pedestal. Es tener el valor de mirarte de frente, reconocer lo que no va bien y estar dispuesto a cambiarlo desde el respeto", resume el psicólogo.