Aplastan con un dedo la escultura más pequeña del mundo

Un fotógrafo ha aplastado por error la escultura más pequeña del mundo. Jonty Hurwitz, de Hampshire, utiliza un proceso de alta tecnología llamado nano-pintura para elaborar representaciones detalladas del cuerpo humano en miniatura. Algunas de sus piezas sólo se pueden ver con microscopio, otras caben por el ojal de una aguja o se pueden sostener en un cabello.

En este caso, un fotógrafo pretendía hacer una sesión fotográfica de una de ellas, la de una mujer desnuda, con las piernas semiflexionadas y los brazos extendidos. La pieza en cuestión medía menos de un milímetro de alto y su autor trabajó en ella durante un año.

El escultor británico, de 45 años, llevó sus puiezas a un fotógrafo para que las fotografiara con un microscopio. Después de realizar una serie de capturas, el fotógrafo intentó cambiar la orientación de la pieza y desapareció. Durante más de media hora buscaron la escultura en la lente de la cámara, pero no encontraron nada. Después, Hurwitz se dio cuenta de que en el lugar en el que debía estar la pieza había una huella dactilar, por lo que el fotógrafo la aplastó con el dedo por error.