Inundaciones

Bienvenidos al norte

Una placa metálica de una valla publicitaria se desprendió en el polígono industrial de A Gándara, en Ferrol
Una placa metálica de una valla publicitaria se desprendió en el polígono industrial de A Gándara, en Ferrollarazon

El Cantábrico le perdonó la vida a los 12 tripulantes del buque atunero Gure Uxua, que se hundió a 60 millas de la costa de Luarca. Gracias a la intervención de varios helicópteros y embarcaciones de Salvamento Marítimo de Galicia y Asturias, cinco de los marineros han sido evacuados hasta Celeiro y el resto han sido trasladados a Gijón. El temporal sigue haciendo estragos en el norte de España. Árboles arrancados, cortes de luz y carreteras e interrupciones en el tráfico ferroviario son heridas que siguen abriéndose en unas tierras acostumbradas al oleaje de once metros, la lluvia durante meses y vientos que no respetan ni mobiliario urbano ni obras colosales como el estadio de Riazor, que perdió parte del techo de uralita de las gradas que acabó sobre el terreno de juego. Se desconoce por qué la tripulación desoyó la advertencia de quedarse en tierra mientras el mar se tragaba tramos de la autopista del Atlántico y sus compañeros pescadores no salían a faenar. Cuidado, que las tragedias en el Norte se alimentan de incautos.