Conciliación

Cursos y talleres para empoderar a mujeres discapacitadas

Obra Social La Caixa participa en un programa contra la discriminación femenina.

Las usuarias, en los cursos y talleres de apoyo para mejorar su autoestima y su posterior inserción en el mundo laboral
Las usuarias, en los cursos y talleres de apoyo para mejorar su autoestima y su posterior inserción en el mundo laborallarazon

Obra Social La Caixa participa en un programa contra la discriminación femenina.

Las personas que padecen algún tipo de discapacidad deben superar obstáculos a diario: físicos y sociales, especialmente si se trata de mujeres.

Mª Carmen Riu, presidenta de la Asociación de mujeres, señala que «las mujeres sufren una mayor discriminación con respecto a los hombres con discapacidad, a quienes se les otorga un papel en el ámbito público mientras que la mujer está en casa», señala. En 2004, la entidad se atrevió a llevar a cabo el «Servicio de atención a la autonomía personal y a la vida independiente de las mujeres con discapacidad», cuyo objetivo es una intervención psico-social laboral destinada a vincular a las mujeres con discapacidad física al ámbito social.

«La asociación decidió poner en marcha una actuación directa para trabajar en favor de estas mujeres», apunta Riu. A día de hoy, trabajan con 105 mujeres con discapacidad, las cuales cuentan con escasa o nula formación y apenas tienen capacidad para gestionar sus asuntos personales. Gracias al apoyo de Obra Social La Caixa, el programa ha podido trasladar su sede a un local más grande y atender así a la demanda: por un lado, ofrece atención domiciliaria a sus usuarias para que aprendan a superar todas las barreras que les inquietan; por otro, se les ofrece apoyo en lo relativo a su formación e inserción laboral. Además, la asociación ofrece también en el ámbito psicológico, cursos y talleres de autoestima para empoderar a estas mujeres. En cualquier caso, antes de poner en marcha esa intervención, los profesionales diseñan un proyecto de vida para cada una de sus usuarias. A partir de ahí, se traza un mapa de la situación: dónde se quiere llegar y los recursos necesarios en cada caso.

Suele dar buenos resultados, cada año «se logra integrar a varias mujeres», señala la presidenta, quien recuerda que «estas mujeres, normalmente, solo cuentan con una pensión no contributiva de 400 euros».