Policía Nacional

Desarticulan una red de trata y liberan a cinco mujeres obligadas a prostituirse

La Policía Nacional y la Policía de Rumania han desarticulado una rganización dedicada a la trata de seres humanos con fines de explotación sexual en Almería

La Policía Nacional y la Policía de Rumania han desarticulado una organización dedicada a la trata de seres humanos con fines de explotación sexual en Almería en una actuación conjunta que se ha permitido liberar a cinco mujeres que eran obligadas a prostituirse mediante continuas vejaciones, coacciones y amenazas en un régimen de total aislamiento en sus propios domicilios.

La operación 'Kebab' se ha saldado, asimismo, con la detención de todos los miembros de la organización, cuatro de nacionalidad rumana

y dos españoles, y el registro de varios clubes de alterne de El Ejido, según ha informado la Comisaría en un comunicado.

La investigación se inició tras la denuncia de una mujer en la Comisaría de Almería en la que manifestaba que desde que era menor de edad estaba siendo explotada sexualmente por un grupo de personas de nacionalidad rumana. Según dijo, había sido captada en Rumania y trasladada hasta Almería por miembros de una organización criminal para obligarla a prostituirse. Si alguna vez se negaba, la amenazaban

a ella y a su familia. Además la maltrataban tanto física como psíquicamente.

Tras las primeras investigaciones realizadas por los agentes, se logró identificar a varios de los responsables e integrantes de la red. También se averiguó su modus operandi y cómo seleccionaban a las víctimas para traficar con ellas, todas eran mujeres jóvenes de origen rumano.

En la operación, la Policía averiguó que todas las víctimas identificadas y localizadas fueron captadas mediante engaño y falsas promesas de conseguir un trabajo bien remunerado en España. Las mujeres vivían bajo una situación de aislamiento y miedo constante, siendo en todo momento coaccionadas y amenazadas por los miembros de la organización, que las obligaban a ejercer la prostitución.

Una vez en nuestro país, los componentes del grupo abusaban de la situación de necesidad de las jóvenes, y con unas condiciones distintas de las pactadas en el lugar de origen de las chicas, les comunicaban que no habían encontrado trabajo para ellas y que debían devolver la supuesta deuda originada en concepto de gastos de viaje y manutención. Para saldarla, les ofertaban ejercer la prostitución en distintos clubes de alterne de El Ejido.

En el transcurso de las investigaciones, los agentes localizaron a otras dos víctimas que la organización había captado para ser explotadas sexualmente en clubes de alterne. Ambas eran mujeres sin recursos, apenas escolarizadas, y que, una vez fueron alojadas en el domicilio que la red controlaba, quedaron aisladas completamente, tanto de su familia como del entorno exterior.

Ante estas circunstancias, pasados unos días desde su llegada, accedían a mantener contactos sexuales. Las jóvenes, cansadas de su situación, y de las continuas vejaciones, amenazas y agresiones recibidas, habían intentado escapar del control de la organización.

Por este motivo el líder, de nacionalidad rumana, viajó rápidamente a Almería para intentar localizarlas, junto con el resto de componentes que ya se encontraban allí. Una vez descubierto su paradero, tras llevar escondidas dos días en diferentes pensiones de la ciudad, las trasladaron a Rumania donde volvieron a traficar con ellas.

Los policías, a través de la Agregaduría de Rumania en España, consigueron hallar el domicilio en el que el máximo responsable de la organización mantenía retenidas a las dos chicas. Con el apoyo de la Policía rumana y, tras la solicitud de una Orden Europea de Detención

y Entrega a la autoridad judicial correspondiente, se procedió, de forma simultánea a la liberación de un total de cinco víctimas y a la detención de todos los miembros de la organización ubicados entre Rumania y España, cuatro de nacionalidad rumana y dos españoles.

Durante el transcurso de la operación se realizaron registros en dos domicilios y dos clubes de alterne en la localidad de El Ejido, en los que se intervinieron 7.820 euros, diferentes dispositivos de telefonía móvil y electrónicos y dos vehículos, con los que trasladaban a las víctimas hasta los distintos clubes de alterne. Además se han bloqueado todas las cuentas bancarias de los encartados.

La operación policial ha sido desarrollada por el Grupo VIII de la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, la UCRIF de la Comisaría Provincial de Almería, la Brigada Local de Extranjería de El Ejido y un equipo de Guías Caninos de Málaga, con la colaboración de la Brigada del Crimen Organizado de Rumania y la Agregaduría de Interior de Rumania en España.