El Amazonas desemboca en Alemania (II)

La Amazonía y Alemania –tan distintas y distantes– compartirán el epicentro informativo este otoño por los sínodos de los obispos que celebrarán para debatir y acordar cuestiones sobre la misión de la Iglesia en estas zonas. Ambos sínodos están llamativamente relacionados: el alemán tratará cuestiones como la comunión de los divorciados vueltos a casar, la mujer en la Iglesia (sin eludir la ordenación), o los matrimonios homosexuales, que ha llevado –incluso– al obispo de Essen a afirmar que «nada va a ser igual en la Iglesia tras el sínodo».

El de la Amazonía plantea la ordenación de varones casados, socavando el celibato. Conocidas son las reuniones previas del episcopado alemán en Roma para prepararlo, que han llevado a algunos a considerar el evento amazónico como instrumental para su homónimo alemán, y a hablar –incluso– de cisma. El instrumentum laboris amazónico afirman algunos que pretende resucitar la Teología de la Liberación por la vía de la teología de una «región cósmica», y ha sido rechazado por cardenales, como Brandmüller (que lo ha calificado como «herético»), Burke y Müller, este último mediante un documento de elevada precisión teológica y doctrinal.

El Papa Francisco ha dirigido una carta a los católicos alemanes recordando las verdades fundamentales sobre la fe y Benedicto XVI advierte de la grave crisis de una sociedad en la que la palabra Dios aparece marginada hasta en la Teología. Arde la Amazonía.