¿Es positivo sacar a mi gato a pasear?

Hasta hace no mucho tiempo, pasear a una mascota parecía exclusivo de los perros, pero últimamente la tendencia está cambiando y cada vez es más común ver a dueños de gatos sacarlos a pasear con sus respectivas correas. Un paseo también puede ser muy enriquecedor para un gato, ya que hace ejercicio y se reduce su interés por el exterior. No obstante, hay que tener en cuenta diferentes variables. Los expertos de Sanicat, marca experta en arenas para gatos y bienestar felino, han elaborado una lista de consejos para que la experiencia de pasear a los gatos sea un éxito.

«El gato es un animal social que necesita compañía y requiere cuidados y atención puesto que, si no, pueden aparecer problemas de conducta. Los gatos son fieles, cariñosos y muy autónomos. Una de las principales razones por las que los adoptan es por la facilidad en su cuidado con respecto a los perros, que requieren más atención, sobre todo, en los paseos puesto que los gatos son animales muy limpios y, únicamente con su arenero, no necesitan salir a la calle para realizar sus necesidades», explica Ignacio Duch, «pet care manager» de Sanicat.

«El paseo puede ayudar en este aspecto siempre que el gato lo acepte bien. Para ello es importante acostumbrarlo desde pequeño y estar atentos a las señales que nos indiquen que es una situación estresante para él. En ese caso será mejor evitarlo», afirma Celia Alesanco Ballesteros, etóloga felina.

Esta experta explica por qué el paseo con los gatos tiene dos opiniones encontradas. Hay quienes opinan que sacarlos a la calle puede ofrecerles beneficios como disfrutar del contacto con la naturaleza y el aire libre, mejorar sus capacidades relacionales, su estado anímico y activar su metabolismo. Además, pasear a los gatos estimula su sensación de libertad y, para aquellos felinos que sean más curiosos, y sociables, salir a la calle será un ejercicio diferente puesto que estará llena de nuevos rincones que descubrir.

Por otro lado, están los que piensan que sacar al gato a la calle puede estresarlos, ya que no se encuentran en su entorno habitual, o puede provocarles situaciones de peligro que alteren su comportamiento. La decisión de sacarle a pasear dependerá mucho del carácter de éste. Si se trata de un gato temeroso y asustadizo, quizás no sea buena idea dar un paseo con él. Si se esconde en casa cuando llega visita o es muy independiente y desconfiado, puedes tener un problema en la calle y generarle mucho estrés.

Ambas opiniones son correctas siempre pensando en el bienestar del gatito, conociendo su personalidad y saber qué es lo que mejor se puede adaptar a él. En cualquier caso, el paseo nunca se haría con intenciones eliminativas de sus deposiciones, que de ocurrir deberían ser recogidas al instante.

Eso sí, algunos de los elementos que habría que tener en cuenta antes de sacar a tu gato a la calle es ir acostumbrándolos al arnés en casa, pues son animales muy inteligentes y aprenden rápido, por lo que, ir haciéndoles a esta herramienta desde pequeño es clave para que luego no lo vean como un objeto extraño y que estén tranquilos y, sobre todo, seguros con el arnés.

«Hay que tener en cuenta que el gato no necesita salir al exterior, lo esencial es cuidar el ambiente dentro de casa. Pese a la creencia habitual de que el gato no necesita tanto tiempo como el perro, destinar cada día un rato para jugar con él y estimularlo física y mentalmente, ayudará a evitar problemas de conducta y a mejorar nuestro vínculo con él», aclara la etóloga felina.