Carreteras

Casi la mitad de los conductores no respeta los límites de velocidad

Las vías secundarias, limitadas a 90 km/h, son las que registran más accidentes y en las que se corre más de la cuenta

Accidente en Burgos en el que fallecieron dos personas
Accidente en Burgos en el que fallecieron dos personaslarazon

Las vías secundarias, limitadas a 90 km/h, son las que registran más accidentes y en las que se corre más de la cuenta

Si piensa coger el coche, concéntrese en respetar al máximo los límites de velocidad. La DGT comenzó ayer una campaña de vigilancia que durará hasta el próximo domingo. Abarca a todo tipo de vías porque la DGT ha invitado a los ayuntamiento y a las comunidades autónomas que tienen transferidas las competencias de tráfico a sumarse a la misma. Además, se realiza simultáneamente en 25 países de toda Europa a través de la Organización Internacional de Policías de Tráfico (Tispol).

De lo que se trata es de concienciar a los conductores sobre este factor de riesgo, ya que «en uno de cada cuatro accidentes está presente el exceso de velocidad y 300 víctimas mortales serían evitables si cumpliéramos los límites establecidos», dijo ayer el subdirector de movilidad de la DGT, Javier Moreno.

Donde los automovilistas son menos respetuosos con los límites legalmente establecidos es en las carreteras secundarias, las que disponen de una sola calzada que comparte los dos sentidos de circulación y por las que transita mayor número de ciclistas, vehículos agrícolas, además de turismos. Precisamente, es en este tipo de vías en las que se concentra el 80 por ciento de los accidentes con víctimas mortales.

Según el último estudio de medición de velocidad realizado por la DGT, en estas vías, el 40 por ciento de los conductores circulan a una velocidad superior a la permitida. De éstos, un 25% supera la velocidad en más de 10 km/h y un 12%, en más de 20 km/h. En el caso de las vías limitadas a 100 km/h, el porcentaje de vehículos que sobrepasa la velocidad establecida es menor. No obstante, la vigilancia en estas carreteras es más intensa durante estas fechas.

Tráfico señaliza ya los tramos de carretera calificados como más peligrosos tanto por los excesos de velocidad detectados como por la siniestralidad que presentan. Se llaman los tramos «Invive» (Intensificación de la Vigilancia de la Velocidad). Ayer dio a conocer la relación completa de puntos que, en total, suman 300. La lista elaborada ha sido fruto del «análisis de velocidad cruzado de excesos de velocidad, accidentalidad y mortalidad en el quinquenio 2010-2014)», especificó ayer el subdirector de Movilidad de la DGT.

Saber que se está atravesando uno de estos puntos en los que extremar la precaución es fácil. Ahora se ha instado debajo de la limitación de velocidad una nueva señal de color naranja que advierte de esta circunstancia a los usuarios de las vías.

Asociaciones de defensa de conductores como Automovilistas Europeos Asociados creen que, en general, en España no se corre mucho en comparación con otros países de la Unión Europea, como la vecina Francia. Su presidente, Mario Arnaldo, discrepa de la idea extendida de que «a mayor velocidad, más muertes». «Con los datos en la mano, esta máxima no es cierta. La prueba es que en 2014, los españoles corrimos más con nuestro vehículo y se contabilizaron menos víctimas mortales con respecto a 2012, por ejemplo, en el que circulamos a menor velocidad y hubo más fallecidos». Arnaldo es de los que opina que España es uno de los países en los que más multas se imponen por exceso de velocidad. «Un claro ejemplo de este hecho es que de la totalidad de las sanciones impuestas por la Dirección General de Tráfico, el 60 por ciento es por sobrepasar los límites de velocidad. Pero esto no es todo, otro dato curioso es que dentro de este porcentaje, el 90% han sido por superar el límite de velocidad de la vía en tan sólo un 10%, es decir, pocos kilómetros por encima de lo establecido».

Más siniestralidad

Mientras, la Fiscalía de Seguridad Vial también ha alertado de la necesidad de extremar la precaución al volante después de comprobar un ligero aumento de la siniestralidad en España. En el acumulado anual hasta el 21 de agosto se llevan contabilizados 748 fallecidos, y el fiscal Bartolomé Vargas daba por seguro que llegaríamos al centenar de muertos durante la «operación verano».

La Comisión Europea ha puesto de manifiesto recientemente la ralentización en la reducción del número de accidentes mortales. La comisaria europea de Transportes, Violeta Bulc, alertó de la necesidad de realizar esfuerzos adicionales para alcanzar el objetivo estratégico de la UE 2010-2020 de reducir a la mitad el número de víctimas mortales. España se sitúa en el sexto lugar con 36 víctimas mortales por millón de habitantes frente a la media de la Unión Europea de 51,4 víctimas mortales.

En 2015 perdieron la vida en las carreteras de la UE un total de 26.000 personas, 5.500 menos que en 2010. No obstante, en comparación con 2014, la situación no ha mejorado. Sólo el 7% de los fallecidos lo fueron en autopistas; el 38% de todas las muertes ocurrieron en vías urbanas. Sin embargo, la mayoría de los fallecimientos (55%) tuvieron lugar en áreas rurales.

Tolerancia 7, de «cortesía»

La tecnología va mejorando y los radares son cada vez más exactos, de tal manera que el margen de error que registran es mínimo, según ha reconocido la DGT en varias ocasiones en el caso de los cinemómetros de última generación. Aún así, los radares guardan un umbral de tolerancia a partir del cual empiezan a multar y a tramitarse la denuncia. Desde hace un año, tanto los fijos como los móviles dan un margen de 7 km/h si la velocidad es inferior a 100 km/h y del 7% si es superior. La Dirección General de Tráfico ha aclarado que la razón por la que se ha establecido el 7, tanto en porcentaje como en cantidad, «es porque los errores máximos permitidos de los cinemómetros se encuentran en una franja que va entre el 3%, los más nuevos, y el 7 % de los más antiguos, de ahí que se considere el umbral de tolerancia más garantista y beneficioso para el conductor». Así, en una vía limitada a 90 km/h, se empezará a tramitar la denuncia si es sorprendido a 97 km/h por un radar y si el límite está en 120 km/h, será multado a partir de 129 km/h.