Una organización animalista denuncia a Colau por la perra abatida a tiros

La alcaldesa, harta de ser interpelada, pide a quien haya visto algo que contacte con el Ayuntamiento o que vaya al Juzgado.

La Fundación Nacional A Salvo ha decidido interponer una denuncia penal por la muerte de Sota, la perra de un indigente que vende en la calle, el día 18 en Barcelona abatida por los disparos de un agente de la Guardia Urbana. Por su parte, Ada Colau, después de recibir muchos mensajes por las redes sociales, ha pedido esta noche a través de un comunicado en Facebook a los posibles testigos, que estén dispuestos a declarar, que se ponga en contacto con el Ayuntamiento o que vayan directamente al juzgado.

La alcaldesa dirige su mensaje a “toda la buena gente que me interpela consternada por la muerte de Sota” y tras calificar el hecho de “horrible”, asegura que “vamos a hacer todo lo que esté en nuestras manos para esclarecer qué ocurrió en una investigación que sigue abierta”. Para ello pide a “quienes hayan presenciado in situ lo ocurrido deben ponerse en contacto con el Ayuntamiento, a través del mail atencio_ciutadana@bcn.cat o si lo prefieren interponer denuncia directamente en el juzgado”.

La petición de Colau se produce una hora después de que unas 3.500 personas se concentraran frente al Ayuntamiento barcelonés para exigir que se depuren responsabilidades y se haga justicia con Sota. Los congregados han pedido, entre otras cosas, que se cambien los protocolos de actuación de los agentes y que se les dé formación animal a todos sean de la unidad canina o no.

La versión oficial de la Policía aseguró tras los hechos que un perro con “apariencia de potencialmente peligroso” atacó y mordió en el brazo a un policía local cuando se dirigió a identificar a su dueño y al verse en peligro se vio obligado a utilizar su arma reglamentaria. Otras versiones insisten en que la perra les ladró cuando vio que media docena de agentes inmovilizaban a su dueño y uno de ellos desenfundó su arma y le disparó a quemarropa un tiro en la cabeza. Los internautas han difundido un vídeo que se ha hecho viral en el que se ve a la perra agonizando en el suelo, moviendo la cola y mirando a su dueño los últimos segundo de su vida.

Colau señala que “No sólo hay que saber qué pasó y cómo, sino evitar que vuelva a suceder en el futuro, mejorando los protocolos de actuación que haga falta” y asegura que el Ayuntamiento irá hasta el final para “que el caso de Sota no vuelva a ocurrir, ni en Barcelona, ni en ningún otro lugar”.

La alcaldesa anunció que se están rastreando las cámaras de los alrededores en busca de más imágenes, porque hay que esclarecer primero lo que ocurrió, con pruebas sobre la mesa, y según cual sea la verdad, tomar las medidas pertinentes”. Por este motivo el Ayuntamiento ha contactado con una veterinaria independiente para la necropsia (autopsia animal) de Sota.

Según la dirigente municipal, “todas las imágenes que hemos visto hasta el momento son posteriores al episodio en sí. Esta es una de las dificultades de la investigación. Por ello no sirve como prueba documental un testimonio que relata haber presenciado lo ocurrido y que circula por las redes sociales”, y concluye que los animales sufren y han sufrido durante demasiado tiempo diferentes formas de maltrato que han sido consideradas “aceptables” por nuestra sociedad. Eso está cambiando y es una buena noticia. Queda mucho por hacer, pero el gobierno de Barcelona nos tomamos muy en serio los derechos de los animales, entendemos que el mundo es tan suyo como nuestro y nos oponemos a la crueldad o maltrato animal”.