Música

Róterdam 2021

Eurovisión con aforos limitados y sin moverse de la butaca

Todos los participantes han grabado una copia de seguridad ante el peligro de que un contagio no permita el directo

Miembro del equipo de mantenimiento del teatro Ahoy
Miembro del equipo de mantenimiento del teatro AhoyROBIN VAN LONKHUIJSENEFE

En un año en el que los extraordinario se ha convertido en anormalmente ordinario, el festival de Eurovisión – cancelado el año pasado por primera vez en su historia- no podía ser una excepción. La ciudad holandesa de Rotterdam acoge en esta ocasión la122 edición de esta cita marcada por la pandemia y en la que los organizadores han hecho encaje de bolillos para intentar garantizar la seguridad de los participantes y asistentes y , a la vez, intentar preservar al máximo el espíritu del concurso. El lema de esta año es Open Up! (ábrete a..). Un eslogan intencionadamente incompleto para que cada uno lo interprete a su manera.

Aunque se llegó a barajar que este año no asistiera público al certamen, al final la organización se ha decantado por limitar aforos e intentar no dejar ningún cabo suelto que pueda arruinar esta cita, seguida por millones de fans en todo el mundo.

A pesar de que el teatro Ahoy en la ciudad portuaria dispone de un aforo máximo de 15.000 personas y el escenario previsto para este año es el mismo que el del año pasado, en esta ocasión tan sólo se aceptará a 3.500 asistentes, que verán limitados sus movimientos ya que deberán permanecer sentados en sus butacas y respetar la seguridad de un metro y medio. Debido a esta reducción del aforo para evitar aglomeraciones, tan sólo han podido hacerse con una entrada para este año los que ya habían adquirido un ticket en la edición del año 2020.

Asistir a Eurovisión en esta edición histórica se ha convertido en una carrera de obstáculos. Los miembros del público deberán contar con una prueba pcr realizada con un límite máximo de 24 horas antes de la asistencia al espectáculo. Holanda sufragará estas pruebas que serán completamente gratuitas. Aunque los niños mayores de 5 años pueden acudir acompañados de un adulto, los considerados grupos de riesgo no podrán disfrutar de este festival, lo que incluye a los mayores de 70 años. Los asistentes deberán llevar la mascarilla puesta en todo momento y tan sólo quedarán exentos de esta obligación cuando se encuentren sentados en su puesto o ingieran alguna bebida o comida. En las instalaciones habrá 170 dispensadores de gel desinfectante. Aunque para muchos fans parte del atractivo del festival reside en ver de cerca de las estrellas participantes, la máxima consiste en el menor contacto posible. Los cantantes y su equipo deberán quedarse en su hotel y tan sólo saldrán para los ensayos y actuaciones.

Los artistas y delegaciones de los 39 países que se disputan esta competición, también están siendo sometidos a pruebas de manera constante, lo cuál también incluye a los 500 periodistas acreditados. Ante el peligro de que un contagio de última hora pueda arruinar su participación en el festival, todos los participantes han grabado una cinta con una actuación que pueda sustituir en un momento dado el show en directo. Debido a lo insólito de la situación, la grabación de esta copia de seguridad también ha seguido un protocolo estricto para que ni perjudique ni tampoco beneficie al participante. Aunque en la era de internet y las redes sociales, algunos cantantes parten ya como claros favoritos, la actuación final puede apuntalar el éxito o suponer el fracaso absoluto si los nervios juegan una mala pasada.

Por eso, la grabación deberá ser en directo sin la utilización de ninguna herramienta de edición ni la posibilidad de corregir desafinados mediante aplicaciones como el autotune. La organización ha decidido dar cierta libertad a los participantes, pero el objetivo reside en no confundir esta cinta con un videoclip sino respetar el espíritu original: se grabará en un estudio sin público y no habrá posibilidad de utilizar efectos de realidad virtual. Aunque esta grabación puede no seguir fielmente la actuación planeada en el escenario, la banda sonora debería ser similar. Los supervisores de la organización accederán a la grabación en directo que durará sesenta minutos, con la oportunidad de realizar hasta tres tomas y elegir la más adecuada. No habrá limites en el número de ensayos previos Además, los organizadores pueden asesorar a los diferente participantes, con el objetivo de que las actuaciones respeten cierta diversidad creativa que entretenga al espectador. Aunque estas copias de seguridad no se han hecho públicas, todos los participantes entregaron estas grabaciones antes del 26 de marzo.